Por Edwin Cavello Limas
Han pasado cuatro años desde que las empresas Aldesa y OHL recibieron las cartas notariales de la empresa AGRUMAQ solicitando el pago de la deuda de más de medio millón de soles. La primera misiva fue dirigida al señor David García Peris, representante legal de la empresa Aldesa, y el segundo documento al señor Álvaro Manchado Mayayo, representante de OHL. las cartas fueron enviadas el 29 de octubre del 2019, pero hasta la fecha solo existe un gran manto de silencio.
En la carta notarial se señala que la empresa AGRUMAQ brindó el servicio de grúas para la construcción del Museo Nacional de Péru (MUNA) —ubicado en Pachacámac— y tras el desmontaje de la última grúa, no recibieron ninguna respuesta sobre la deuda. Desde hace cuatro años AGRUMAQ solicita que cumplan con cancelar los pendientes por la suma de $ 158, 789.65 dólares americanos más IGV que comprende los adicionales del montaje, las horas extras de las cinco grúas desde el 20/03/2017 al 20/05/2018 y los adicionales por los trabajos realizados los días domingos. Esto sería una estafa por parte de Aldesa y OHL, y fue permitido por el propio Ministerio de Cultura y por la UNOPS de las Naciones Unidas.
El 11 de marzo del 2020, AGRUMAQ envió una carta notarial a la UNOPS, comunicando el tema de la deuda, pero desde las oficinas de las Naciones Unidas, se siguen haciendo los locos. Una pregunta pertinente es ¿Por qué UNOPS permite que se atropelle a las empresas que participaron en la construcción del MUNA? Ante las continuas cartas enviadas al Consorcio MUNA y UNOPS, el Gerente General de AGRUMAQ al no tener respuesta luego de dos años, decidió enviar una carta notarial al Ministerio de Cultura el 27 de mayo de 2021. En el documento se detalló la información sobre los pagos pendientes que viene incumpliendo el Consorcio MUNA. Lo sorprendente es que esta carta notarial tampoco fue respondida por el Ministerio de Cultura, es decir, la institución actualmente encabezada por la ministra Leslie Urteaga intenta mirar a un costado y lavarse las manos aplicando la política del “perro muerto”.
En noviembre de 2021, Lima Gris se comunicó con el señor David García Peris, representante legal de la empresa Aldesa, y con el señor Álvaro Manchado Mayayo, representante legal de OHL con la finalidad de recoger sus descargos sobre las millonarias cifras que adeudan a las empresas. —Porque no solo es una empresa, sino varias que se encuentran haciendo cola para poder cobrar—. En ese momento Álvaro Manchado Mayayo respondió la llamada y al ser consultado sobre la deuda, se negó a responder y cortó la comunicación.
También nos comunicamos con la UNOPS, y rechazaron tajantemente toda imputación relativa a presuntos actos de corrupción. Increíblemente, también UNOPS se lava las manos en todo lo referente a la millonaria deuda que se viene arrastrando por más de cuatro.
La experta en contrataciones con el Estado, Mónica Yaya, señala que el Estado es el mayor estafador contra las empresas peruanas. Y ha entregado la soberanía que tiene el Perú de decidir quién debe ejecutar las obras a los organismos o países extranjeros. Finalmente nos preguntamos ¿La ministra de Cultura Leslie Urteaga hará algo? Lo mínimo que podría hacer es gestionar los pagos para cumplir con la deuda. Es momento de erradicar la cultura del “perro muerto” del MINCUL.
(*) Periodista y director de la revista Lima Gris