Dentro de la iniciativa «Unidos contra el crimen» liderada por el Ministerio del Interior
Hasta la fecha de este año, la Dirección de Seguridad del Estado de la Policía Nacional del Perú ha dado golpes contundentes contra la venta ilegal de celulares de procedencia incierta, confiscando 10,388 de estos dispositivos comercializados en distintas galerías y centros comerciales a lo largo del país, según lo anunció el Ministerio del Interior (Mininter).
Estos resultados relevantes fueron fruto de la ejecución de 124 operativos y 29 megaoperativos dirigidos a desmantelar los mercados clandestinos donde se ofrecían estos teléfonos móviles sin la documentación legal correspondiente o que estaban registrados como robados.
Estas acciones fueron producto de una labor de inteligencia minuciosa llevada a cabo por el personal de la División de Investigación de Delitos contra el Estado, con respaldo de otras unidades policiales, que identificaron los puntos de venta de estos dispositivos.
Además, en estas intervenciones se logró confiscar 3,510 placas de celulares y 168 equipos de cómputo empleados para modificar los teléfonos.
El Mininter resalta que, en los operativos realizados por la Dirección de Seguridad del Estado de la PNP, también se inspeccionaron centros comerciales y farmacias, resultando en la retirada de circulación de un total de 1 millón 136 mil 200 productos farmacéuticos alterados o caducados, que representaban un riesgo para la salud pública.
A lo largo de estas acciones a nivel nacional, la Policía Nacional también confiscó 5,500 cigarrillos falsificados, 4,042 artículos pirotécnicos, dos armas de fuego y 74,624 cilindros de gas licuado de petróleo (GLP), además de haber detenido a 313 personas, incluyendo tres con órdenes de captura.
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“Juntos bloqueamos a la delincuencia”
Es crucial destacar que estas acciones se integran en la campaña «Juntos bloqueamos a la delincuencia» del Ministerio del Interior (Mininter), que busca intensificar los operativos policiales para enfrentar de manera directa el robo de teléfonos móviles, la recepción ilegal y los mercados ilícitos de compra y venta de dispositivos tecnológicos.
La campaña se centra en informar a la población sobre los beneficios del Decreto Legislativo N° 1578, que implica el fortalecimiento de penas, la inclusión de nuevas formas delictivas y la mejora del marco legal. También ofrece consejos para prevenir el ser víctima de la delincuencia.
Con la promulgación de esta normativa, el robo de celulares ahora se considera como un delito agravado con penas que oscilan entre los 12 y 20 años de prisión efectiva.
Sin embargo, si el robo se ejecuta con el uso de explosivos o en motocicletas, las penas se incrementarán desde los 20 hasta los 30 años de prisión como máximo.
Asimismo, el delito de recepción conlleva penas de 2 a 4 años de prisión, mientras que la recepción agravada puede alcanzar hasta 12 años de encarcelamiento efectivo.
Finalmente, la compra de un teléfono móvil robado puede implicar una pena de 4 a 6 años de cárcel, y si proviene de un robo agravado, la pena va desde 6 hasta 12 años tras las rejas.
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