Abogado del cabecilla terrorista busca sacarlo de prisión argumentando prisión argumentando posible contagio de COVID-19
La defensa legal del terrorista Abimael Guzmán Reynoso ha puesto en marcha un plan para liberar al cabecilla de Sendero Luminoso argumentando un posible contagio de coronavirus en la prisión donde se encuentra en la Base Naval.
El Poder Judicial resolvió admitir a trámite la demanda de hábeas corpus que interpuso el abogado Alfredo Crespo a favor de Guzmán, contra el presidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) “por amenaza cierta e inminente a su derecho a la vida y a la salud”.
El documento, dirigido al director del centro de reclusión de la Base Naval del Callao, solicita que personal de la Marina de Guerra del Perú informe si el otrora cabecilla del grupo terrorista Sendero Luminoso, quien cumple cadena perpetua por el delito de terrorismo en agravio del Estado, «se encuentra o no infectado con el virus COVID-19”.
RECURSO
En ese sentido, el recurso admitido por el juez supernumerario Ángel Romani Vivanco exige se le haga conocer al abogado de Guzmán Reinoso qué medidas se han adoptado en el recinto carcelario a fin de “conjurar los efectos de la pandemia”.
Asimismo, deben detallar si al fundador de la referida organización terrorista se le está brindando la atención que requiere «tanto por ser un adulto mayor, como por las enfermedades pre-existentes que podría tener” y en caso de haberse contagiado de COVID-19 si es que está recibiendo “el tratamiento, aislamiento o traslado a un centro hospitalario o establecimiento penal creado para tales efectos”.
Por último, la resolución precisa que toda la información referente al estado de salud del terrorista de 85 años debe remitirse “con el carácter de urgente” a la Corte Superior de Justicia de Lima del Poder Judicial.
DETALLE
Por ello, el pasado 24 de mayo Romani solicitó al INPE y a la Marina de Guerra que detallen cuál es el estado de salud de Abimael Guzmán, si es que se le está brindando la atención que requiere, así como si se le permite recibir medicación prescrita por médico autorizado.
Del mismo modo, se pidió especificar en qué condiciones está cumpliendo su carcelería, además de si ha presentado sintomatología de contagio de COVID-19. De haber dado como positivo a una eventual prueba del virus, el juez solicita que se informe sobre el tratamiento correspondiente.
“Toda información es necesaria para los efectos de determinar si las condiciones en que sufre carcelería son las que corrresponden”, indican los oficios.
MEDIDAS
De otro lado, también se pide señalar si personal de la Marina de Guerra, a cargo de la custodia de Abimael Guzmán, se encuentra infectado con COVID-19. También si se ha tomado medidas con el objetivo de evitar contagios en el recinto carcelario.
La resolución establece, finalmente, que toda la información sobre el cabecilla terrorista sea remitida “con carácter de urgencia” a la Corte Superior de Justicia de Lima a través del correo electrónico oficial de dicha instancia.
PEDIDO
De acuerdo al documento que el letrado remitió forma parte de la población vulnerable frente a la propagación del coronavirus COVID-19, debido a sus 85 años de edad problemas de salud.
“En nuestro país se vive una situación de emergencia nacional sanitaria a raíz de la propagación del virus COVID-19 y siendo el caso que el beneficiado con la presente acción ya lleva casi 28 años de prisión ininterrumpidos y es una persona de alto riesgo debido a su edad avanzada y que, además de otras dolencias sufre de hipertensión arterial, situación que configura una amenaza a su vida y salud”, escribió Crespo Bragayrac.
Sobre los problemas de salud del condenado terrorista, el abogado hace hincapié en que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) no puede brindar los “cuidados especiales” que se requiere.
Por ello, Crespo agrega su pedido a la instancia judicial que se evalúa el estado de salud de Abimael Guzmán y las medidas sanitarias de la Base Naval del Callao.