El señor Pedro Castillo, hoy en la Presidencia de la República y casi cumpliendo cien días en el sillón presidencial, — se desconoce qué michi ha hecho en esos cien días. El sombrerón desde entonces se ha decidido a repetir como papagayo: vamos hacer; vamos a implementar. La ciudadanía reclama, pero… ¿cuándo? Se va a iniciar lo que tanto promete. De dónde va a sacar los miles de millones de soles para hacer obras que menciona.
De la cueva de Breña salieron las designaciones de la Dina; del impresentable Puka Bellido—pobrecito llora con la chapa. —Nombró a Maraví y anotaron los nombres de los suplentes por si acaso: Barranzuela, Gallardos y más impresentables.
Después del secreto cubileteo en el distrito de Breña, del que no hay registro alguno, el sombrerón se ha mudado a la Quinta de Pizarro. Del cual todos los días y a cada rato sale a lanzar malditada y media a los demócratas de la oposición. Sin descuidar hacerse el San Francisco o el Robín Hood como le aconseja el hoy su enemigo Cerro grande de la mano de cerro chico en el Congreso.
Vean nos perdemos, por puntualizar las deficiencias de este nombrado Presidente, con fraude, o por la gracia de otro comunista como el presidente del JNE en insistir la inmensa calidad inmoral para seguir en el sillón presidencial. Lo que ya es redundante insistir que la vacancia presidencial se la ha ganado a pulso. Señores del Congreso no caigan en el canto de sirena que está contando la premier. Todo parece y da la impresión que Pedro Castillo estuviera diciendo: a mí que chu que la premier diga lo que quiera. Yo voy por mi camino y voy a estatizar el gas de camisea. Luego los adulones saltan para enmendarle la plana: ´on no digas eso.
Ahora el espectro comunista ha ingresado a un callejón sin salida. Todos quieren un pedazo de la torta estatal. Cerro grande y el chiflado cerro chico pujan para hacerse de la cosa pública. Aparentemente rompen palitos con Pedro Castillo y lo llaman traidor. Tanto es la pica y amargura de esos que han convertido a la Quinta de Pizarro en un callejón de un solo caño. Entran y salen los chismosos y los seudo consejeros como cabecebuque lescano.
Otro aspecto del raro perfil de estos atorrantes comunistas como el Puka que han dado en victimizarse y se arrancan con: qui mi terruquean; que mi dicen impresentable. A ver, pregunta: ¿por qué mi terruquean? ¿por qué soy impresentable? Está demás enumerar todas las facetas que tienes tú como impresentable.
Ya pues señores. El pueblo el real pueblo y no los delincuentes que siguen a Castillo le piden de una vez abocarse a la vacancia presidencial. No es posible soportar una más de este incapaz. Pensaron los ingenuos que de tanto grotesco chamullo sería capaz de enfrentar en cambio de ideales y proyectos a cualquier político de trincheras democráticas.
Desilusión tal vez para sus propios correligionarios. El brillante joven abogado Lucas Ghersi profesional del Derecho y como es sabido hijo del ilustre jurista Dr. Enrique Ghersi, está brillando con luz propia y se ha dado un tiempo para cursar una invitación y no desafío, — para que no se asuste, al Puka Bellido. Pena, caray este kosqoño ha arrugado de la peor manera. La misma “invitación “cursó a la Zaira una que suele repetir su tirria a la derecha y más derecha y siempre la derecha. No tiene más argumento. Pues ésa habla de la constituyente por aquí y por allá. Que es lo mejor del mundo y nosotros tontos nos estamos perdiendo. Lucas el abogado le dijo que se anime a debatir un par de minutos. Pero también arrugó. Y desde mi punto de vista creo que hicieron bien pues el Dr. Lucas los iba a dejar como zapatilla de payaso.
(*) Miembro (r) de la Marina de Guerra y analista político.
