Después de unos pocos años de democracia Castillo nos ha devuelto al nivel de republiqueta, desde palacio suelta cada nombramiento que es como para hincharle las bolas al más pintado.
Oye, tú, llaman al hermanón. Este, hermanón, primero crítico del sombrerón, dando lustre a su ADN de adulón corre al llamado. Aquí estoy a sus órdenes mi presidente. -Verás, quiero que seas mi asesor. ¿atracas? Pero claro mi presidente. Yo juego en medio campo reparto bola y Ud. mi querido presidente ya verá qué hace con ella. El hermanón no sabe hablar en concordancia con el idioma. Todo se le ocurre con términos futboleros. Él dice que son metáforas. El asunto es que este hermanón no tiene más idioma que el futbolero. Con el nombramiento de a mentiritas de este chamullo estafador, el sombrerón sigue en su línea de nombrar a indeseables para altos cargos de la administración pública.
Salió pues este estafador hermanón a la prensa vociferando el llamado, personal, del nada menos que el presidente de la república. Oye, tú—nuevo llamado. -Ordene mi presidente. -Verás, sabes que mejor no, ¡Bórrate! –Pero, esteee… yo puedo patear penales, su majestad, perdón, señor presidente. – Nada qué ver, hazte humo.
Se fue el hermanón por la puerta falsa y despotricando contra la prensa culpable de que lo hayan borrado. Y en ese ritmo el sombrerón va nombrando delincuentes y prontruariados para altos cargos. Qué michi le importa el país, él debe obedecer las órdenes de otro terruco como Cerrón, el que hoy ya no toma chicha con mosca, sino que bebe whisky y se empuja el rancho en los comedores de grandes y finos restaurantes como el Country Club de San Isidro. Y ahí va acompañado del gringo Waldemar… su hermano; él prefiere el ruso, Vladimir. De repente estará requintando porqué michi es cerrón y no Washington o Kennedy o mejor Malenkov, Molotov o por qué no, Putín.
A manera de segunda parte paso a ver, someramente, las adulaciones del rastrero enano en sus trece.
No sé a ciencia cierta desde cuándo comenzó el enano a tenderse al piso para adular a los gobernantes. Odia al mejor presidente de la república Don Manuel A. Odría. -Claro la función del general fue irrumpir en la política para poner orden. Los maricones apristas estaban comiendo a Bustamante y Rivero. Lo arrinconaron sin chance para revertir la avalancha de esos cutreros.
Adulones hay, como el enano. ¿Otros como el morboso Lezcano -estás calatita en la camita? Pero como cínico al nivel del Lagarto …le han sacado la frase de contexto. Este cabecebuque es un lobista de a medio. “que vamos a dar la confianza. -Seguro ya le dieron algo. Otro de la misma calaña es un chino mediagua. “Vamos a votar por la gobernabilidad”. Vean si no es idiota y cobarde ese chino. Ese chino es peligroso y ha vuelto a usar la frase que puso de moda del calzonudo y su mujer: Nadie diga ni haga ninguna crítica al gobierno en salva “la gobernabilidad” Y … se la llevaron en paila. Este chino pone en riesgo la vacancia que se ha ganado el sombrerón.
Una más del sombrerón y sus compinches, es el proyecto que envía al Congreso para modificar las causales por las que se vaca a un presidente de la república. Según ese proyecto elimina la causal de inmoralidad. Solo se puede vacar a uno que sea declarado loco de remate… Y ahí habrá un siquiatra muy solícito para decir que el locumbeta no lo está tanto, sino que le gusta ensartar la aguja por donde no hay hueco. Entonces el cojo mame ya puede candidatear igual que “Caracol”. Ser delincuente no es causal de vacancia. Tardelli… ¿no creen? Pedro Castillo se ha ganado a pulso la vacancia. A los del congreso digo. No le hagan caso al chino tibio- Adelante con la vacancia.
(*) Miembro (r) de la Marina de Guerra y analista político.