Para la mayoría de ciudadanos nuestras fuerzas armadas han sido siempre vistas desde su rol como guerreros, preparados para la defensa nacional y las operaciones antiterroristas, de acuerdo a nuestro ordenamiento jurídico nacional, ellas tienen la finalidad primordial de garantizar la independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República, excepcionalmente y bajo condiciones extraordinarísimas pueden asumir el orden interno como se establece en el artículo 165 de nuestra carta magna, pero muy pocos de nosotros prestamos atención al artículo 171º, que indica y precisa el papel que nuestras fuerzas armadas deben desempeñar en el desarrollo económico y social del país, tengamos en cuenta que juntas estas tres instituciones, Marina de Guerra, Ejército y Fuerza Aérea, tienen una gran disciplina, capacidad organizativa y suman en su filas más de 95 mil efectivos activos y 100 mil más en sus reservas, todos prestos a colaborar en cualquier tarea que se decida emprender, esta gran energía bien dirigida, canalizada y acompañada de programas de carácter social, podrían significar la diferenciación entre los países de la región, que necesitamos para enrumbarnos hacia el desarrollo, la presencia militar y su logística, casi omnipresente en todo el territorio nacional, nos permitiría fácilmente que el Estado a través de esta, desarrolle de manera subsidiaria y sin entrar a competir con la empresa privada, las actividades y servicios necesarios que hagan notar la presencia del Estado tan reclamada en los lugares más recónditos de nuestra patria.
La Marina podría liderar a las tres fuerzas armadas en llevar salud a los pueblos más alejados, ellos cuentan actualmente con un sistema de salud eficiente y eficaz, el Ejército debe abocarse a través de sus veinte, bien equipados batallones de ingeniería, a la construcción de vías e infraestructura necesarias para que el Estado incremente su presencia, la Fuerza Aérea debe encargarse de la logística para que todas las acciones que se realicen cuenten con un flujo continuo de insumos, sin que esto signifique que las tres fuerzas armadas se integren a los diversos planes de manera conjunta y en el marco de lo que puedan aportar para que los objetivos se logren, es también importante tener siempre en cuenta, tareas que pueden realizar de manera unida las tres fuerzas armadas en tiempos de paz, como la alfabetización, la lucha contra la minería ilegal en zonas de Selva y el trabajo de desarrollo fronterizo, a través de las unidades militares de asentamiento rural, que han perdido fuerza a lo largo del tiempo pero que fueron creadas, bajo el concepto de desarrollar las fronteras para no seguir perdiendo de facto territorio nacional, estos campamentos bien equipados y relanzados participarían en la ejecución de actividades y obras de infraestructura de desarrollo rural fronterizo, logrando ampliar nuestros acervos forestales, agrícolas e infraestructura que incentiven a los ciudadanos a poblar las zonas fronterizas y con esta presencia evitar posibles pedidos de anexión a otras naciones, dependerá de nuestras autoridades, convocar a las fuerzas armadas, desarmadas temporalmente en tiempo de paz para que cumplan su rol constitucional de sumarse al desarrollo del país.