¡Por supuesto! Estamos al límite y en alto riesgo de aniquilar lo poco de democracia que todavía existe en el Perú, y lo peor, de destruir y empobrecer más a nuestra sociedad, producto de la “Inseguridad Jurídica y la Inseguridad Ciudadana” los dos factores más importantes en cualquier estado nación libre y soberana para asegurar la garantía del libre comercio a los inversores. Y es que esta situación ‘’De Inseguridad’’, viene destruyendo y empobreciendo al estado peruano, como a todos los sectores de trabajo (Minería, agricultura, pesca, turismo etc.), además de afectar directamente a nuestra economía a tal extremo que ya ni los inversores nacionales quieren arriesgarse a invertir en el país, y así menos lo harán los inversores extranjeros, aunque la Presidente y el ejecutivo sigan viajando al extranjero en busca de capitales.
Solo existen megaproyectos a futuro, con porcentajes de inversión extranjera superiores a los nuestros, lo cual obliga a tener mucho cuidado con las cláusulas de los contratos. Pero si analizamos los datos estadísticos, la economía del Perú está en rojo desde el año 2015 ya que si crece al 3.5% anual, solo cubre el crecimiento de la demanda interna en el año, es decir no crece, ya que el crecimiento real se da solo cuando se supera el 3.5% y eso como ya se ha dicho, no se da hace varios años y lo peor es que desde el 2017 el crecimiento anual es negativo ya que está por debajo del 3.5%, o sea no hay crecimiento positivo. ¿Y el ministro de economía actual solo recién últimamente anuncia que estamos en recesión? ¿Por favor recién se da cuenta, noooo…?
Entonces qué es lo primero que tiene que hacer este gobierno para revertir la debacle económica del país, lógicamente tomar acciones claras y contundentes para neutralizar y desaparecer la inseguridad jurídica y ciudadana, dando Políticas y leyes claras y permanentes que atraigan y den seguridad a las entidades y grupos financieros internacionales, para invertir en el Perú y además, facultar a las fuerzas del orden que actúen con la rigurosidad que les concede la Constitución para reprimir al terrorismo, narcotráfico y bandas delincuenciales de todo orden, y actuar en acción conjunta y coordinada con el Poder Judicial, a fin de impedir la impunidad, además de establecer programas sociales de ayuda a las clases más necesitadas, a fin de mitigar principalmente el hambre y las inclemencias que los azota día a día en diferentes regiones del país.
Así que Señora Presidente, Usted, sus ministros, directores y jefes de las diferentes entidades del estado, tengan en cuenta el límite del alto riesgo que vive el país en sus respectiva áreas y pónganse a trabajar en armonía para salvar al Perú de este riesgo que no se merece, sino pronto será aprovechado por los intereses internos y externos que ya conocemos de las diferentes organizaciones en el plano nacional e internacional que están alineados con la ideología del Comunismo Internacional del Siglo XXI, el nuevo orden internacional y la agenda 2030, los mismos que promueven la destrucción de los conceptos de patria y familia, que son los pilares de una sociedad organizada y estable en el tiempo.
El Perú no puede esperar más y peor con recesión económica, estamos ad portas de nuevas elecciones presidenciales. Señora Dina Boluarte, es su deber como presidente del Perú entregar un país saneado en todo sentido al nuevo gobierno, le quedan dos años y medio de gestión para que por lo menos dé solución a los problemas descritos. No se defraude a Usted misma y menos al pueblo peruano, la patria y la historia no la perdonarán.
¡Demora para enfrentar la recesión, inseguridad jurídica y ciudadana nunca más!