¡Niebla en el horizonte! Eso es lo que se ve hasta ahora en las futuras elecciones presidenciales del 2026, si no se cambian al Presidente del JNE, Jorge Salas Arenas, cuyo mandato termina en noviembre del presente año y al Jefe de la ONPE, Piero Corvetto, quien concluye su periodo en agosto del 2024.
Ambos personajes enfrentan críticas y cuestionamientos por fraude electoral por parte de varios sectores en las últimas elecciones del 2021 y su vinculación a la mafia Vizcarrista. Lo cierto es que ambos organismos son elegidos por la Junta Nacional de Justicia (JNJ) según los artículos 180 y 182 de la Constitución Política del Perú.
Como se sabe la (JNJ) es la que meses atrás, a través de un decreto injusto e inesperado fuera de todo análisis jurídico, originó la salida de la Fiscal de la Nación Patricia Benavides cuyos reclamos, fundados en la Constitución y las leyes, posteriormente han traído como consecuencia el caos completo del Sistema Judicial en el Perú, incluyendo la destitución por el Congreso de la República de algunos miembros de la Junta Nacional de Justicia.
Todos los peruanos esperamos que la niebla se disipe en este sentido y tengamos pronto nuevos representantes que gocen de un alto nivel profesional, de honestidad y valores en el JNE y en la ONPE, organismos tan importantes para llevar a cabo elecciones limpias y transparentes fuera de toda sospecha de fraude que garantice el futuro del cambio positivo que el Perú y la sociedad necesita con urgencia.
Al margen de lo expresado, vemos también la niebla del congreso al interpelar a los ministros del Interior Víctor Torres, de Cultura Leslie Urteaga y de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, por los malos manejos en sus respectivas carteras. También se interpelará en los próximos días al Ministro de Salud César Vásquez Sánchez, debido a que el Decreto de Urgencia 059-2020 que obliga a las farmacias a ofrecer medicinas genéricas no fuera prorrogado oportunamente, por aplicar vacunas COVID vencidas y el manejo del DENGUE que ya lleva 44 fallecidos, lo que sumado se traduce en un atentado contra la salud de los ciudadanos más pobres del país, entre otros problemas más, y también se debería interpelar a la Ministra de Educación Miriam Ponce por la grave situación en que se encuentran la infraestructura, saneamiento y servicios básicos, además de la falta de mobiliarios de la mayoría de los centros educativos públicos del Perú al inicio de las clases el presente año.
Peor aún si ante tanta niebla que cubre el Perú y se agrava cada vez más la seguridad ciudadana, principal problema que afecta a nuestra sociedad y a todos los sectores del estado, la presidente Dina Boluarte se vanagloria de haber sido elegido nuestro país como sede de los Juegos Panamericanos como si esa elección fuera parte de la solución a todos los problemas que aquejan a nuestro estado nación ¡Increíble!
Señora Presidente Dina Boluarte, disipe la niebla ya, o empezará la tormenta.
(*) Teniente general FAP en retiro