La mayoría de peruanos parece que no ven o no sienten ni se dan cuenta de lo que verdaderamente está pasando en el país. Lo que está sucediendo con la Inseguridad Ciudadana no es casualidad, parece que estuviera aconteciendo a propósito y siendo promovido por el propio gobierno de Dina Boluarte y compañía. Guarda similitud a lo que sucedió en la década de los ochenta con el terrorismo en pleno y se le atribuía como acciones delictivas, la misma que terminó con la derrota de Sendero Luminoso y el Movimiento Túpac Amaru por la Decisión Política y la acción de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas en la década de los 90.
Ahora con una nueva estrategia que comenzó a partir del año 2000 sucesivamente, y se fue incrementando con otros medios. El comunismo utilizó en forma sistemática el apoderamiento de los organismos del estado, inicialmente con Valentín Paniagua y Diego García Sayán hasta los períodos de Pedro Castillo y Dina Boluarte.
Así se les fue dando preeminencia en el tiempo, inicialmente a una educación con ideología tergiversada de la realidad sucedida, invirtiendo la historia para asegurar a la niñez y juventud futura y a un sistema judicial infiltrado. Ambos con Comunistas y Caviares para administrar lo que hoy vemos, como el caos de la justicia en el Perú y así las demás entidades públicas, hasta llegar a una corrupción generalizada, que ahora con el apoyo de bandas nacionales y extranjeras han incrementado las estadísticas de muertes, secuestros, extorsiones, sicariato, robos etc. Esto con el objetivo ulterior de terminar de destruir a la sociedad peruana con la ideología socialista del Siglo XXI de cimientos en el extranjero y promovidos a muchos países en la región con resultados nefastos para sus sociedades.
¿Qué pensarán hacer ahora los comunistas y caviares con el proceso electoral para las elecciones del 2026, teniendo a favor la situación planteada y hasta el momento con más de 40 partidos inscritos en su mayoría de izquierda, con probabilidades todavía de que existan algunos más?
Pensamos que con los filtros establecidos, los partidos políticos que no sobrepasen las vallas del porcentaje de control numérico requerido para las presidenciales, quedarán hábiles para la segunda vuelta más o menos 15 partidos o de repente menos si se habilitan algunos filtros más y quizás la bicameral estaría más controlada, por lo menos en número de diputados y senadores por partido.
El problema estaría quizás ya no en la cantidad de partidos que queden, sino en la “Calidad de los representantes”, atributos y condiciones que todavía el congreso no ha especificado y esperamos que lo haga en estos días.
Por eso, “Si queremos ver y sentir al Perú democrático y libre de nuevo”, los peruanos de centro derecha y derecha debemos unirnos, dejar de lado las ambiciones e intereses personales y alinearnos con el líder que sobresalga ante los demás por sus capacidades personales, su carácter decidido, sus conexiones en el extranjero y que promueva y se comprometa en su campaña quizás a cumplir siete aspectos que la sociedad reclama con ahínco para vivir en paz y salvar al Perú si sale elegido presidente.
Con respecto a lo anterior, estas propuestas serían 1- Terminar con la inseguridad ciudadana, 2- Otorgar a las Fuerzas del Orden la autorización plena del uso de sus armas de fuego para combatir el terrorismo, narcotráfico y la criminalidad, 3- Salirnos de la CIDH, 4- Controlar al máximo los ingresos y destinos de los Organismos no gubernamentales (ONGs) y la inmigración descontrolada 5- Prohibir y normar el uso de armas de fuego, privar su uso y porte para los civiles en vías y áreas públicas 6- Implementar la pena de muerte para terrorismo, sicariato, extorción, secuestro, pedofilia, tráfico de menores, asesinato por robo, violación y ataques a las fuerzas del orden y a cualquier ministro de Fe que incurra en delitos de corrupción 7- Reforma urgente del Poder Judicial.
¡Estamos advertidos!
(*) Teniente general FAP en retiro