Me encanta recordar aquello de la Teoría de los Cisnes Negros. Ella describe un suceso sorpresivo de gran impacto socioeconómico y que, una vez pasado el hecho, se racionaliza por retrospección, dando la impresión de que se esperaba que ocurriera. Fue desarrollada por el matemático y científico libanés Nassim Taleb.
Este tema lo leí hace ya un tiempo por Investing.com y su analista Laura Sánchez, quien refería que esta teoría fue promovida por el descubrimiento de cisnes negros en Australia en el siglo XVII, una especie desconocida en los países occidentales, y que podían tener un impacto desproporcionado en nuestro mundo.
Curiosamente entonces ello se aplicó a eventos financieros, con la característica de que eran imposibles de pronosticar y que, pueden desencadenar caídas abruptas en los mercados.
Y en este contexto son ocho los principales cisnes negros que han provocado las mayores caídas en Bolsa a lo largo del último siglo.
Uno es el Crack del 29, lo que se prolongó 33 meses, llevando la rentabilidad del índice Dow Jones un 86% por debajo de su máximo y una serie de aspectos tratados con detalle por diversos autores.
Un segundo cisne es la Crisis de las Puntocom [2000], que con el auge de internet y el comercio electrónico, presentaban modelos de negocios que utilizaban como base la red mundial de Internet. La burbuja empezó a sufrir la caída de algunos valores, contagiando el miedo entre los inversores. En tan sólo dos años, el mercado perdió cerca de cinco billones de dólares.
Un tercero fue la crisis financiera del 2008, la de las hipotecas(sub Prime) , que tuvo caídas en bolsa hasta de 54% y ello duro hasta 17 meses, extendiéndose a nivel global Vino un cuarto en el 2020, la pandemia mundial ocasionada por la COVID-19, que provoco confinamientos y cierres a nivel global, y sus consecuencias, tanto en pérdidas humanas como económicas, fueron devastadoras. En solo dos meses, los mercados cayeron un 40%.
En 1987 hubo un lunes negro. El índice norteamericano Dow Jones se hundió un 22,6% en una sola sesión, volatilizándose casi una cuarta parte de la capitalización bursátil.
Luego otro cisne es la reciente guerra con Ucrania con una invasión militar a gran escala por parte de Rusia. El impacto en bolsa del estallido de una guerra en pleno siglo XXI en el corazón de Europa no fue tan severo como su influencia geopolítica. Las caídas en los mercados fueron del 18% y todo el tema de la energía fue complicado.
Cuenta como cisne, los atentados del 11S [2001] en New York que ocasionaron un fuerte impacto en las bolsas. Y, finalmente, en el 2016 el Brexit. Y en ciernes el conflicto de Israel y la posibilidad de un choque de titanes entre China y los EEUU.
Ver: https://es.investing.com/news/economy/8-cisnes-negros-que-han-provocado-las-mayores-caidas-en-bolsa-2385003
