Mi amigo Jorge Baca, Phd en economía, econometrista, y con experiencia de ministro y otras lides, me envió un “Whatsaap al paso” que resumía su planteamiento y posición sobre lo que hay que hacer en la economía peruana.
Jorge sigue siendo un eximio consultor del FMI y Banco Mundial y a veces lo contacto y está por Surinam, Vietnam o una isla del Caribe con las misiones de estos organismos y trabajando activamente. Sin más preámbulo expongo su WhatsApp con su pensamiento que es altamente recomendable.
El Perú en los cincuentas llegó a crecer 85.9% en 10 años (1947 – 1957). Durante la época de Fujimori llegamos a 53.1% (1992 – 2002). Y, en el segundo gobierno de García (2003 – 2013) llegamos a 85.8%.
Por lo tanto, llegar al 100% en 10 años económicamente es factible como lo han hecho varios países asiáticos. La pregunta más bien es ¿Cómo crecer 100% en 10 años?, pues ello implica crecer en promedio 7.1% por año.
El crecimiento de la población en el Perú está a 1.7% por año. Así que ese es el primer factor. El segundo factor es la inversión. Para crecer 7.1% se requiere una tasa de inversión próxima al 40% del PBI. En el Perú en el mejor de los años la inversión ha representado 30% del PBI (se logró con la creación de las AFP y EsSalud) en la época en que la informalidad era baja.
El último factor es la productividad y en el aumento de la Productividad está la clave de poder crecer 100% en 10 años. Ahora ¿cómo lograr que la productividad crezca 70% en 10 años? (ya que el 30% restante lo podemos lograr con ahorro interno y externo y crecimiento poblacional). La respuesta está en la educación, mejor salud, y sobre todo eficiencia institucional.
El problema es que una buena educación no se consigue en 10 años, y peor con la educación pública que tenemos. Igual podemos decir de la eficiencia institucional (la ley de descentralización ha sido un desastre) y la gestión del sector público un fracaso.
Finalmente, lo que yo considero indispensable es lograr la igualdad de oportunidades para todos y en eso sí estamos como el cangrejo. Las brechas entre la educación pública y la privada se agrandan y eso limita la igualdad de oportunidades y aumenta la tensión social.
La peor productividad la tenemos en el campo. Si no logramos aumentar significativamente la productividad de los campesinos (para por lo menos igualarla con la agricultura moderna de nuestras exportaciones agrícolas) no podremos crecer al 7.1 %.
Los países asiáticos lo lograron aumentando significativamente la productividad de su sector agropecuario. ¿Cómo lograrlo en el Perú? La respuesta está en una masiva educación de los campesinos tanto en leer y escribir como en técnicas de producción agropecuaria. La siembra y cosecha de agua y el uso apropiado de semillas y fertilizantes es lo que permitirá aumentar la productividad en el corto plazo.
Pero aún así nos falta algo para lograr el 7.1% de crecimiento anual. Y ese algo es la plena integración de los peruanos. Mientras tengamos un sistema educativo que genera diferencia de oportunidades no podremos lograr ese aumento de productividad requerido en todos los sectores.
Esa diferencia de oportunidades es la que genera la corrupción y la ineficiencia. Para solucionar esa brecha de oportunidades necesitamos algo drástico. Roosevelt en 1932 propuso el Civil Conservation Corps para plantar millones de árboles, construcción de pequeños caminos y reservorios, para enseñar técnicas de manejo de suelos y extensión agrícola, pero al mismo tiempo permitió al pobre y al rico compartir la experiencia de ayudar a los más necesitados.
En los EEUU se aplicó a 9 millones de norteamericanos durante 10 años. Creo que eso se podría lograr en el país mediante la creación de algo similar al SERUM pero obligatorio para todos los peruanos un servicio civil para todos pobres y ricos, orientado a fomentar la solidaridad y la unión entre peruanos y la igualdad de oportunidades a través de la ayuda a los más necesitados.
Son 300,000 peruanos que cada año se integran a la fuerza laboral, el programa tendría que ser implementado para ellos y con participación de las Fuerzas Armadas, que son los que saben cómo organizar la logística y la disciplina de tamaño número de hombres y mujeres. Esta estructura permitiría contrarrestar el sesgo socialista que padecemos y nos deja cada vez más subdesarrollados e ineficientes.
Señala Baca que en Brasil se pasaron 50 años con el cuento de la «seca» sequía del Nordeste, hasta que cambiaron la Constitución al fin del gobierno militar y se hizo el reservorio del Rio San Francisco que permitió al Nordeste progresar en base a la Agricultura. Ahora Brasil es el primer productor de soya, de carne, de jugo de naranja, de café, etc. y todo esto a pesar de la corrupción campante.
Jorge finiquita este interesante WhatsApp al paso señalando que aquí en Perú queremos resolver todo simultáneamente, pero hay una clamorosa falta de recursos. Si se opta por la inversión extranjera ella se lleva la parte del león. La única solución es utilizar los recursos que genera la minería, que no es renovable, para aumentar la agricultura que es renovable y adonde se encuentran los más pobres y los de menos productividad.
Ahí es donde hay que realizar el “Big Push” y luego vendrán los otros sectores. La teoría del Big Push afirmaba, que un país requiere para entrar en un periodo sostenido de crecimiento económico autogenerado, un programa de inversión masiva diseñado para promover industrialización y construcción de infraestructura.
Esto formulado por Paul Rosenstein-Rodan en 1943 llevó a un gran auge en programas de ayuda para el desarrollo. Pero no produjeron lo esperado y por ello desde 1986 varios reformularon la propuesta y se propuso que para que el crecimiento tuviera éxito «debe haber, como mínino, varios proyectos de inversión en industrias diferentes a fin de asegurar un aumento de los retornos a escala a partir de las indivisibilidades en la producción» .
