La carabina de Ambrosio refiere a un objeto inútil, o que no sirve para lo que está ideado. Data de 1729, pero su más cercana referencia parece ser una inofensiva invención de un tal Luis Monotot, que señalaba que un asaltante andaluz del siglo XIX, atracaba en los caminos con una carabina que no estaba cargada con pólvora, sino sólo con semillas de cañamones o algún otro tipo de perdigón inofensivo.
Algunos estudios lo refieren a un origen apócrifo.
Pero en la revista “Por estos mundos” (Madrid, 1900) apareció esta versión sobre el personaje del dicho proverbial; es decir un tal Ambrosio, un labriego que existió en Sevilla a principios del siglo XIX. Como las cuestiones agrícolas no marchaban bien a su antojo, decidió abandonar los aperos de labranza y dedicarse a salteador de caminos, acompañado solamente por una carabina. Pero como su candidez era proverbial en el contorno, cuantos caminantes detenía lo tomaban a broma, obligándole así a retirarse de nuevo a su lugar, maldiciendo de su carabina, a quien achacaba la culpa de imponer poco respeto a los que él asustaba o trataba de amedrentar para robarles sus pertenencias.
Haciendo un alcance simplón, estarán muchos de ustedes de acuerdo conmigo, que el sonso de capirote y demás hierbas Pedro Castillo tenía su réplica de la “Carabina de Ambrosio made in Chota” acompañándolo con ese espécimen del Anibal y la Bessie en su absurdo golpe de Estado en diciembre. Pero asimismo algo parecido tienen en su curul, gran parte de los los 130 papis y mamis de la patria, que jamás se juntan todos en el “Hemiciclo” y que con todo los recutecus hasta el N. 130 se lleva al bolsillo mínimo unos US$ 10,000 promedio mensual . Además un quatum de ellos tienen venalidades y fringe benefits, mochan sueldo, por algo les dicen “niños” a una pequeña manada; viajan a la India y a China, engordan en embajadas locales, vive una tipa en licencia en Miami, hay dueños de universidad cerradas y etc; que además pueden tener por allí más y más “businesss” y arreglos para terceros y la verdad ese cuento de que representan a sus electores, es como el cuento de la carabina de Ambrosio.
Hago eso si la salvedad y que quede meridianamente claro, una digresión con este y anteriores Congresos y miembros de prestigio que los ha habido, pues como Institución yo la respeto sin duda alguna por el bien de la democracia. Este es en mayoría una pocilga sin la menor duda.
En este contexto y con lo actual el “Best Seller” que le gana a la flaca disoluta Sigrid Bazán en su “performance” en Comas y lo del cuasi terruco Bermejo, es sin duda el caso patético del puesto de Presidente de la Mesa Directiva de este Alicaído Congreso, puesto por ese señor Acuña, a uno que hasta niega a la amante en la TV política abierta.
Y es que aún existen los votos de blindaje que alimentan la carabina de Ambrosio, que hace que la mayoría de estos zánganos sinvergüenzas y demás cosas , las usen con supuesta harta y fallida pólvora, hasta que alguien diga “stop” y salgan disparados unos a su casa otros a la cana y de yapa la que está en Palacio a dar rendición de cuentas desde al menos cuando fue ministra. La carabina de Ambrosio no sirve ya para nada, ni para las polillas. Ni siquiera tienen algo para cargarla y ni siquiera un blanco, un target para liquidar a la presa. Jejejejejejejejeje. La mayoría son presas para meterlos a un cilindro hirviente.