El conocido analista Mohamed A. El-Erian, le achaca a la Fed , que en los últimos dos años, se ha equivocado repetidamente en su análisis, formulación de políticas, comunicaciones y gobernanza. Nos recuerda que en el 40º aniversario de su ascensión al trono, la reina Isabel II señaló que «1992 no es un año en el que miraré hacia atrás con placer sin diluir”. Ello quiso decir que fue ese un “annus horribilis».
Le pasó de todo, como un incendio en el Palacio de Windsor y el final de dos de los matrimonios de sus hijos .Pero el reconocimiento abierto y honesto de la reina de estas dificultades, ayudó a solidificar otras tres décadas de enorme respeto nacional y global por la monarquía. No parece ser el caso de la Fed, quien ya lleva 2 años consecutivos de “annus horribilis” con la enorme falla de haber creído que la inflación tenía carácter transitorio.
Y por ello a sus miembros , les parece necesario que en el 2023 recupere la credibilidad de la política, restaurar su reputación y reducir su vulnerabilidad a la interferencia política indebida y al no actuar de manera oportuna, para contener los aumentos de precios, que desde entonces han erosionado el poder adquisitivo de todos.
En el 2021, la Fed volvió a equivocarse y no fue hasta marzo de 2022 ,que dejó de inyectar su sine die, de millonaria liquidez por US$ 120,00 millones por mes en bonos, en una economía cada vez más inflacionaria., su primera alza fue de tímidos 25 puntos básicos.
Ello ha promovido que el banco central más poderoso del mundo, se haya visto obligado a entrar en el ciclo de alzas acelerado en décadas, y en un momento en que la economía ya se está desacelerando, existe una creciente preocupación de que lleve a la estadounidense a una recesión innecesaria sin suave aterrizaje.
Si bien la inflación está disminuyendo , esto se producirá a costa de daños indebidos a los medios de vida. La comunidad financiera no resiste un nuevo “Año Horrible” de la Fed. Esto que es controversial y muy discutible, tiene su correlato ,aunque con grandes diferencias en el tamaño ,con el Perú que tiene una economía con un mercado laboral en gran proporción informal y un enorme laberinto político.
La suba de la tasa de referencia a casi el 8% , aún no baja a la “Horrible Inflación”.