De manera muy “oportuna” y hasta “pirotécnica”, el fiscal José Domingo Pérez presentó finalmente su acusación contra Keiko Fujimori.
Ya se sabe que el señor considera que los aportes de campaña en el caso del partido Fuerza Popular representan o tipifican el delito de Lavado de Activos.
La verdad es que se ha demorado muchísimo en hacer lo que ya todos estaban esperando que culmine. Desde su punto de vista, Odebrecht le dio dinero a Keiko en dos campañas consecutivas.
Para probar eso, el fiscal tiene las colaboraciones eficaces del sobrino de Jaime Yoshiyama Tanaka, que se llama Sasaki, que afirma que su tío le contó que Odebrecht lava plata. Mucho más que eso no hay, no tienen el testimonial de ningún ejecutivo de Odebrecht. No tienen nada contundente, salvo el caso de RPP.
¿Y cuál es ese caso que tan celosamente guarda la prensa peruana? Se dice que el gerente general de RPP, Hugo Delgado, conminó al señor José Chlimper, que pagase una deuda que tenía el partido Fuerza Popular en plena campaña.
El hecho es que Chlimper le dijo que él no tenía el dinero y que lo podía avalar, a lo que el ejecutivo del Grupo RPP le dijo que necesitaba la plata sí o sí.
Según la tesis fiscal, el señor en mención se comunicó con Yoshiyama y éste con el prófugo Carlos Monteverde, dueño de la empresa Construmaq SAC, que nunca en su vida fue auspiciador y nunca puso un comercial en la famosa radio, y terminó llevando 220 mil soles en efectivo, los cuales fueron ingresados a la contabilidad de RPP.
Eso es lo único realmente contundente que tiene para probar que Odebrecht dio dinero de manera irregular a la campaña de Keiko. Yo, la verdad, desde la época que Carlos Raffo le llevaba la campaña anterior a la última y dijeron que habían hecho rifas de electrodomésticos para financiar una campaña, yo me maté de risa porque era evidentemente imposible.
Es por eso que están en el problema que están no solamente Keiko, sino la señora Ana Vega, Pier Figari, Yoshiyama, y seguramente secretarios y tesoreros, porque tampoco es creíble y nunca lo fue que pudieran levantar una cantidad de fondos millonarios haciendo cocteles. Las cifras simplemente no cuadran.
Pero así y todo, sigo considerando que los aportes no tienen cómo ser delito, porque en esa época los partidos políticos no sabían que Odebrecht era una empresa ladrona y coimera y que en el departamento de operaciones estructurales se blanqueaba el dinero.
Entonces no sabiendo ellos el origen ilícito de ese dinero, difícilmente sería un delito, sino una falta administrativa.
Evidentemente José Domingo Pérez ha cumplido una función política brillante para que junto con IDL Reporteros, el señor Gorriti, el señor Cateriano, y prácticamente todos los medios de comunicación destrocen su imagen pública para terminar haciendo un golpe de Estado que hizo el “Lagarto” Vizcarra.
Pero de ahí a que haya cometido delito, es bastante complicado que lo prueben, aunque para serles sinceros, es irrelevante que se lo vayan a probar o no, porque los jueces y fiscales son profundamente anti fujimoristas y muy rojos o rosados o “caviares”, por algo han tomado la Junta Nacional de Justicia.
Entonces el destino de Keiko creo que es inexorable si no gana la presidencia, cosa que yo veo muy improbable, va a tener que pasar por un vía crucis judicial de un par de años y terminar presa, porque en primera instancia seguro la van a condenar, se ratificará en segunda y hasta que llegue a la Suprema la volverán a meter presa.
La situación es bien complicada para ella. Y en ese mismo orden de cosas, todos los otros señores que han recibido de Odebrecht van a terminar en el mismo lugar, como Susana Villarán, Castañeda, seguramente algún mandamás del Apra y en fin, de todas las agrupaciones como el PPC que también recibió dinero de Odebrecht.
Así que lejos de aplaudir la desgracia de Keiko, los demás partidos que pongan “las barbas en remojo” porque ese destino horrible de los barrotes de Keiko, lo van a sufrir varios.
(*) La Dirección no se hace responsable por los artículos firmados.
