Lo de las encuestas del fin de semana pasado ya ha sido el colmo del ridículo. El instituto de Estudios Peruanos publica en La República, un diario que evidentemente tiene grandes problemas de subsistencia sin el subsidio del Estado, que va a dejar de ser una realidad si es que López Aliaga es Presidente.
Sale con un ¡Sondeo!, es decir ni siquiera se toman el trabajo de hacer un simulacro y pone primero a Keiko, a López Aliaga y a De Soto, prácticamente empatados, con el ánimo de dividir el voto de lo que ellos llaman “derecha”.
Y claro, tratar de levantar la posibilidad de que Keiko pase a segunda vuelta, porque es el rival más fácil de todos, seguido por De Soto, y por supuesto “Porky” es la bestia negra de la caviarada y el comunismo en el Perú el día de hoy.
Pero sí llama la atención la desesperación por utilizar las encuestas hechas en un escritorio, como armas de manipulación de la opinión pública. Lo propio se puede decir de la encuesta de Ipsos “Yo te apoyo”.
El señor Torres no sé en qué mundo vive. Una cosa son sus opiniones, sus deseos, fobias, desesperación, que seguramente son las mismas del Grupo el Comercio que está en las mismas que sus socios de la república en grupos plurales, es decir américa Televisión y otros canales, en el sentido de que si López Aliaga es Presidente, simplemente no les va a subsidiar sus negocios que no venden periódicos, que tienen altos costos, en fin.
Ellos tienen el problema de muchos empresarios en el Perú de otros rubros que no son el periodístico, y se la tendrán que rebuscar, pero ya a llegar a niveles de descenderlo a sexto lugar o de “malograr” o “colapsar” su página web luego de un debate donde López Aliaga ganó en todas las redes, como la de ATV, la del JNE, de Willax TV, de Frecuencia latina, etc. Hay mucha desesperación. Eso no quita que sigue siendo un problema horrible el Coronavirus. Mil muertos al día es una locura. Ha muerto Elidio Espinoza, el exalcalde de Trujillo, una persona conocida con una trayectoria seguramente discutida, pero a la hora de la hora es un ser humano que ha tenido que dejar su vida por este virus.
El propio George Forsyth, imprudente o no, se ha contagiado en los mercados y eso evidentemente va a fastidiar su campaña porque no podrá movilizarse la última semana. Es un hombre joven y se le desea lo mejor; él y su familia tienen todos los recursos para los mejores cuidados. Lo que sí ha llamado la atención estas últimas semanas es que no haya una determinación de todos los candidatos en expulsar a Odebrecht, al Club de la Construcción y a todas las empresas brasileras que le han robado tanto al estado peruano.
Es más, el propio Hernando de Soto, que tiene como brazo derecho a Miguel Vega Alvear, un hombre relacionadísimo con la Cámara de Comercio de Brasil y con todas las empresas de ese país que han venido al Perú, seguramente es íntimo amigo de Marcelo Odebrecht, de barata, de la gente de OAS, en fin.
Yo no entiendo qué espera Lescano para deslindar del Club de la Construcción, pese a que tiene a Beto Velarde como su hombre de confianza y accionista de una empresa que ha lucrado con estas obras truchas.
Extraño lo de Forsyth. Presumo que es su ligazón con el tema de Toledo, de su padre, su tío y toda la caviarada. Hasta Keiko no deslinda con Odebrecht, algo que me parece horrible. Ni siquiera Verónika Mendoza dice que se les va a expulsar del Perú.
Hay algo muy raro en esta campaña. Que los canales detesten a López Aliaga me parece natural y el odio seguramente es bien ganado. Pero que no deslinden de Odebrecht es realmente algo horroroso, atroz.
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