Es muy triste lo que está pasando en el Peru. Todo se ha vuelto irracional, ilógico, absurdo. Nada se puede explicar desde el punto de vista frío, sino, por el contrario, todo es un hervidero.
El hecho es que al cierre de esta edición, ya murieron tres peruanos. Un niño de 16 años, con las iniciales K. R. D.
Una persona tan peruano como Inti o Bryan que se llama Reynaldo Reyes Ulloa, no pasará este fin de año con su familia y sus padres, sus hermanos, lo van a extrañar toda la vida.
Además, ha fallecido un adulto mayor como consecuencia de la falta de atención, estando él en un bus y siendo un paciente oncológico.
Asimismo, mujeres y niños con problemas respiratorios, como consecuencia de las bombas lacrimógenas. ¿Y quién es responsable de toda esta barbaridad? Desde mi punto de vista es el congresista Lenin Bazán, porque desde el primer día que fue allá, a Chao, Virú, prometió un aumento de sueldo que él sabe que no es viable.
Pero como es comunista y tiene que agudizar las contradicciones, y destrozar todo lo que venga al frente que sea progreso, tenía que seguir calentando la pradera, y en la mañana de ayer se bloqueó la carretera en un acto delictual, porque cruzar camiones en Chao, en pleno pueblo impidiendo que la gente transite y después agarrándose a pedradas con la policía, eso es evidentemente un acto subversivo y un delito.
Por supuesto, medios irresponsables le dan tribuna a este señor como si fuera él representante de una legítima protesta, cuando ya se aprobó una ley que los productores dicen que es inviable, tal es así que diversos gremios han avisado que sus fábricas y sus fundos cierran, porque no van a poder darles seguridad a sus trabajadores ya que no pueden cumplir con la ley y esperan que el Ejecutivo la observe.
Pero lejos de esperar una iniciativa del Gobierno, simplemente bloquean carreteras y tiran piedras, ya no solo en el norte sino también en el sur. Entonces tenemos que esperar más muertos para que el Gobierno reaccione, cuando lo que tenemos es un desgobierno.
El señor Sagasti está asustadísimo en Palacio de Gobierno, se dedica a hacer Zoom con sus amigos, a despertarse a las 9 de la mañana, a tomar café, a ponerse pañoletas, a vestirse de morado, tal es así que le están cambiando el color a EsSalud, en una maniobra absolutamente burda y propia de todos los moraditos de Julio Guzmán.
A su vez, la señora Violeta Bermúdez da una conferencia de prensa con la doctora Mazzetti (Me pongo a pensar si de verdad es una persona interesada en salvar la vida de los seres humanos).
Y resulta que amplían el toque de queda en 11 provincias costeras y lo llevan a las 10 de la noche a las cuatro de la mañana, cuando la noticia real es que no hay camas UCI, mientras que el oxígeno comenzará a agotarse en muy pocos días. Todavía no acabamos el año y hay caos y desolación en todo el Perú.
Estaba viendo notas pasadas del noticiero del PBO y el 16 de agosto el suscrito ya denunciaba la farsa de las vacunas. En agosto, señores, cuando reinaba ese miserable llamado Martín Vizcarra Cornejo, al cual han tachado como candidato al Congreso, donde busca más impunidad de la que todavía goza.
El hecho es que el Perú es un país sin derrotero, sin liderazgo, sin futuro inmediato, esto no lo va a parar nadie y van a haber más bloqueos, más pedradas, más gases lacrimógenos, y seguramente más muertos.
Lo que quiere, en buen romance, la izquierda absolutamente desbocada, es que terminemos en una guerra civil para que esto se vuelva un caos para patear el tablero a la Constitución e inclusive ni siquiera llegar a las elecciones.
Lo que estamos viviendo es algo desolador, es algo muy triste, algo sórdido, pero ese es el Perú real. El Perú de la gente que de manera subversiva está haciendo que nos matemos entre nosotros.
Es una pena, pero es cierto, está ganando el comunismo.
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