Por: Phillip Butters / Esa presentación del domingo pasado porque, claro, no le puedo llamar entrevista a lo que realizó Vizcarra frente a cámaras, le han traído más problemas que felicidades. Ha lucido disconexo, balbuceante, tartamudeante, ha “cantinfleado”. Okey, pero es lo mismo que hace todos los días, es más de lo mismo.
El tema es que se le agotan los cuentos. Ya la gente está harta de escucharlo de que él es el bueno y los demás son malos, de los complots en su contra. Ya la gente lo único que quiere es dinero y le pide bonos mañana, tarde y noche. Y por supuesto, el dinero se va a acabar, pero además el tema de la pandemia -que también tiene harta a la gente-, no acaba y él no hace más que decir que va a venir la segunda ola, pero no le pone a la gente la prerrogativa de decidir sobre su futuro, habida cuenta de que no hay trabajo, la gente igual sale a las calles a vender como ambulante, como taxista o como mototaxista o a ser conductor de combi. Para colmo el congreso amenaza con extender 10 años, el permiso de las combis y eso evidentemente va a ser una medida híper populista que va a acarrear que como en los 80s muchísimos peruanos se lancen a ese tipo de cultura y manera de sobrevivir, pero recordemos que los ambulantes están en todos lados, y que alcaldes como Forsyth se están dedicando a perseguirlos, cosa que va, como no, a poner a la gente en una situación muy violenta. Pero Vizcarra sigue con los mismos discursos y con sus mismas balbuceantes ideas. No tiene equipo, porque uno lo ve a Martos y es simple y llanamente un tipo transparente, porque parece un ¡Holograma!; Pilar Mazzetti, sigue alertando con que la cosa está bien pero va a ir peor; “Toni” Alva, tartamudea, se limpia las manos de sudor y no hace más que anunciar malas noticias, claro, que las disfraza.
Es decir, tenemos a un Vizcarra agotado, sin discurso, sin operadores políticos, con el único sostén del dominio absoluto que tiene sobre los medios de comunicación. Pero Vizcarra no tiene “jugadores”. Vizcarra cree que es como Gareca que, en determinado momento tuvo un equipo y que funcionaba. Y por supuesto, que tenía a Paolo. Vizcarra, nunca ha tenido un equipo, nunca ha tenido ejecución presupuestaria, nunca ha tenido una política económica. A diferencia de Vizcarra, el señor Gareca se preocupó porque Perú tenga una manera de jugar. Perú sale con Trauco, la toca con Renato Tapia, puede descargar sobre derecha para que André Carrillo desborde. O por izquierda, claro que estará ausente contra Paraguay “Orejita” Flores y como no, Jefferson Farfán hace una dupla tremenda con el “capitán” ausente. Pero por último, Gareca tenía hasta “Cuevita” que –digamos- podría ser intermitente pero en cualquier momento hacía una gran jugada, cosa que esperamos que pase el día de mañana, pero Vizcarra no tiene nada. Vizcarra no tiene siquiera un Gallese, que le tape las posibilidades de gol. O si claro, -si quieren Gallese puede ser- el Grupo El Comercio, el Grupo La República o el Grupo RPP, serían pues los defensores del régimen. Pero reitero, no tiene a nadie que le haga la diferente. En buen romance, busca un “Cuevita” desesperadamente. ¿Se atreverá a hacer algún cambio ministerial? lo dudo, todavía falta tiempo para la Navidad y ya se le agota la posibilidad de ser candidato, cosa que a él le encantaría.
Entonces, ¿Qué cosa va a hacer? ¿Buscar de la nada a un nuevo operador político? Ya no lo tiene, la situación es muy complicada. La diferencia de lo que vive Vizcarra, no es un partido de futbol de las eliminatorias, ¡él maneja a un país!. Si nosotros perdemos o empatamos mañana, no va a pasar nada, le quedan todas las eliminatorias por delante al “Tigre”. El drama de Vizcarra es que se le agota su tiempo de Gobierno y cada vez es más evidente que es un fracasado, mentiroso, simplista y un continuo mitómano, y eso, a la hora de la hora, la Gente no se lo va a perdonar, porque acá ha habido 80 mil muertos y van a haber millones de personas quebradas. Y reitero este no es un partido de fútbol, esto no es un juego, esta es la vida misma, este es el futuro del Perú que esta por explosionar.
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