Se acerca un gran evento internacional que es el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), del cual el Perú es anfitrión. Inusualmente, el Perú tuvo que autorizar el ingreso de 600 militares norteamericanos para garantizar la seguridad de los líderes de las 21 economías más grandes del mundo.
Al margen que, si la aprobación fue un pedido del Gobierno estadounidense, por la supuesta venida del presidente Joe Biden, no se necesita mencionar que el Perú es un país inseguro.
Usted, señor ministro del Interior, Juan José Santiváñez, es el directo responsable de la seguridad del país, que heredó en muy mal estado y que es su deber recomponer en un contexto difícil, que es la pérdida de autoridad, que incluye la falta de respeto a la presidente Dina Boluarte, que casi no puede ir a sitios públicos o, como el caso reciente del ministro de Salud y que no solo los afecta a ellos, sino a congresistas, jueces, fiscales, etc.
Ello demuestra que la educación y los valores de la sociedad peruana están por los suelos. Y si también se suma a los tradicionales violentistas y subversivos que quieren destruir nuestra democracia, y, de otro lado, que la delincuencia, las extorsiones y en general el crimen campea, estamos al borde del caos y del nihilismo.
Estos violentistas y subversivos quieren ver hundido al Perú y van a aprovechar el foro de la APEC para destruir la imagen del país, que no es viable, que nuestra democracia es fallida y que en la Nación se violan los derechos humanos.
Usted, señor ministro, tiene la gran responsabilidad que ello no ocurra. No debe importarle si quiere entornillarse en el cargo, ni en el que dirán. El Perú está por encima de todo. Usted debe garantizar la seguridad de todos, peruanos y extranjeros y si tiene que utilizar la mano dura, úsela, sin dudas ni murmuraciones.
Los subversivos buscarán los muertitos, es su táctica para victimizarse, sea por un probable exceso de las fuerzas del orden o por accionar de ellos mismos. Ya se conoce su forma de actuar.
Por eso, no se amilane y actúe como patriota. Actúe desde el primer momento que esa chusma atente contra la democracia, contra la integridad física de los peruanos, contra la propiedad y contra las fuerzas del orden. Utilice las armas que le da la democracia.