Desde que Rusia invadió brutalmente a Ucrania (24 de febrero de 2022) muchas empresas moralmente responsables, dejaron el negocio con Rusia y salieron del mercado ruso.
Esta decisión es correcta, ya que las empresas que han optado por retirarse de Rusia no solo se están beneficiando de un impulso de reputación, sino también están generosamente recompensadas por los mercados financieros. Mientras tanto, los que se quedan corren grandes riesgos de perder su reputación y sus ganancias.
Según los investigadores de la Escuela de Administración de Yale (EE.UU.), las empresas públicas que abandonaron Rusia después de la invasión de Ucrania son recompensadas con enormes ganancias del mercado de valores. Y los que se quedan, por el contrario, tienen riesgos tanto financieros como de reputación.
También existe el riesgo de que las empresas que no han salido de Rusia sean boicoteadas por los jóvenes, quienes, tanto como posibles clientes como empleados, son partidarios de los valores corporativos y actúan rápidamente cuando se decepcionan.
Por el momento, el Instituto KSE identificó alrededor de 2213 empresas, organizaciones y sus marcas de 75 países y 55 industrias en el mercado ruso (https://kse.ua/about-the-school/news/impact-of-foreign-companies-self-sanctioning-on-rf-economy-4/). Aproximadamente la mitad de ellos son públicos. 1537 empresas extranjeras han reducido, suspendido o parado sus operaciones en Rusia. El número de empresas que han parado sus actividades es 1087, de las que han reducido las operaciones corrientes y suspendido nuevas inversiones – 450.
70 compañías extranjeras son los contribuyentes más grandes que pagaban cerca de $ 20,2 mil millones de impuestos cada año, aún no han salido completamente del mercado ruso, aunque suspendieron o redujeron sus operaciones. Pero las decisiones paliativas no son suficientes. Si el mundo quiere que el futuro y la libertad prevalezcan sobre el pasado y la tiranía, no se puede combatir el mal con una mano y darle medicina, ingresos y otros recursos con la otra. Lo más importante es dejar de hacer cualquier tipo de negocio con Rusia. Dejar de pagar impuestos que financian las armas rusas que están matando a la población de Ucrania.
El sector empresarial ha decidido retirarse de Rusia debido a los riesgos de cumplimiento, así como por la toxicidad de trabajar con Rusia. El hecho que alertó a las compañías extranjeras es la cancelación el 30 de marzo pasado por el gobierno ruso de la responsabilidad por las importaciones de productos de marca sin el permiso del titular de esta.
Además de esto, el 24 de mayo el Parlamento de la Federación Rusa aprobó el proyecto de la ley “Sobre la Administración Externa para la Gestión de la Organización”. El proyecto de ley propuesto, de hecho, legitima las incursiones estatales. Este documento prevé la posibilidad de designar una administración externa para empresas con al menos un 25% de capital extranjero. Si el proyecto de la ley en referencia entre en vigor, todos los accionistas grandes extranjeros corren el riesgo de perder sus inversiones y propiedades en Rusia.
Tales iniciativas son una seria advertencia para las empresas de todo el mundo que aún planean continuar haciendo negocios en Rusia. Tarde o temprano perderán su dinero y sus activos en Rusia. Más aún, cualquier tribunal civilizado no tendrá acceso para resolver el asunto de su recuperación. La única solución racional para las empresas extranjeras es irse de Rusia ahora, cuando todavía se pueden mitigar las pérdidas directas e indirectas.
(*) Encargado de Negocios de Ucrania en Perú