En la Ley de Presupuesto 2024 se debe destinar 420 millones de soles adicionales, a distribuir entre los 196 gobiernos locales provinciales del Perú, así como en los 43 gobiernos locales distritales de Lima, para financiar la implementación de acciones adicionales e inmediatas destinadas a los fines de la seguridad ciudadana.
Así lo planteó el congresista José Luna Gálvez ante la Comisión de Presupuesto del Congreso, durante el debate para la aprobación de dictamen que propone la Ley de Presupuesto para el año 2024.
Según indicó, estos recursos se deben financiar con el saldo presupuestal de libre disponibilidad de la fuente de financiamiento Recursos Ordinarios del año 2023, es decir, dinero que no ha sido invertido en el año.
La propuesta indica que, a cada uno de los gobiernos locales, el Ministerio de Economía y Finanzas le asignará entre un millón y dos millones de soles, según la priorización de criterios aprobados mediante resolución ministerial.
Explicó que el objetivo es que los municipios tengan los recursos para dotar a sus cuerpos de serenazgo de las herramientas necesarias, como equipos de protección y armas no letales, para enfrentar la delincuencia, además de que puedan adquirir cámaras de seguridad que brinde la información necesaria para la labor policial.
El parlamentario lamentó que, en estos momentos en que el Perú sufre un incremento de la ola delincuencial, se haya asignado para el próximo año recursos insuficientes para revertir la inseguridad ciudadana.
“Se ha asignado apenas 36 millones de soles para la investigación criminal, mientras para las comisarías, S/ 18.4 millones; para el programa de Reducción de delitos y faltas que afectan la seguridad ciudadana, 62.1 millones de soles. en los gobiernos subnacionales se tiene cientos de pequeñas inversiones que suman apenas S/ 57 millones, y S/ 251.7 millones para la reducción de delitos y faltas, pero solo para 36 gobiernos locales”, explicó.
De otro lado, en la misma sesión, el parlamentario demandó que se asigne 100 millones de soles adicionales, a través de Qali Warma, al presupuesto para las ollas comunes para que pueda atender la creciente población que hoy ha vuelto a caer debajo de la línea de pobreza y de desempleados, debido a la crisis y recesión económica que enfrenta hoy el país.