Protesta en la Plaza Mayor: Los manifestantes indicaron pertenecer a la zona de Torreblanca Baja, en el distrito de Carabayllo, y exigían la instalación del servicio de agua potable y desagüe para su sector. La Policía logró reubicarlos.
A menos de 24 horas de que el Poder Judicial dispusiera que el Poder Ejecutivo retire rejas que impedían el ingreso al Centro de Lima por vulnerar el derecho a la libertad individual y libre tránsito, se registró la primera protesta en la Plaza Mayor, lugar donde este tipo de manifestaciones están prohibidas.
A las 08:30 horas de este miércoles 28 de setiembre, un grupo de alrededor de 200 manifestantes se juntaron en la Plaza Mayor con cornetas, pancartas y banderolas. Se trataba de ciudadanos de la zona de Torreblanca Baja, en el distrito de Carabayllo, quienes exigen la instalación del servicio de agua potable y desagüe para su sector.
Algunos de ellos habían acudido al lugar con sus hijos menores en brazos.
Protesta en la Plaza Mayor (Latina Noticias)
Algunos de los manifestantes señalaron que no tenían conocimiento de que estaba prohibido realizar protestas en la Plaza Mayor, mientras que un dirigente indicó que lo único que hacían era reclamar sus derechos.
“Esto no es una protesta, es un derecho que nos pertenece, de agua y desagüe. (…) Venimos a reclamar nuestros derechos”, dijo a Latina Noticias.
Añadió que son más de 1000 personas las afectadas por falta del servicio básico de agua en esa zona de Carabayllo.
Pocos minutos después de que se diera esta manifestación, decenas de efectivos policiales se concentraron en el lugar y lograron convencer a las personas a que se alejaran de la Plaza Mayor.
Orden del PJ
Cabe indicar que el martes, tras varios días de reclamos por parte de los comerciantes de las inmediaciones del Centro de Lima, el Primer Juzgado Constitucional de Lima dispuso que el Poder Ejecutivo retire las rejas que impedía el acceso a los establecimientos comerciales aledaños a la Plaza Mayor del Centro Histórico de Lima, por vulnerar el derecho a la libertad individual y libre tránsito sin justificación legal ni razonable. La medida fue cumplida desde este miércoles.
En la resolución, la jueza Miagros Grajeda exhortó al Ejecutivo y al jefe de la Región Policial-Lima abstenerse de colocar rejas de manera permanente. La magistrada emitió este fallo al declarar fundada una demanda de hábeas corpus presentada por el ciudadano Carlos Fernández Vélez en favor de los trabajadores y consumidores de los establecimientos comerciales de los alrededores de la Plaza Mayor.
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Comerciantes afectados
Los comerciantes de la zona habían visto afectadas sus ventas desde que colocaron las rejas que rodean este lugar turístico. Los transeúntes tenían dificultades para llegar a estos restaurantes e incluso, muchos eran impedidos de ingresar por efectivos policiales que resguardan estos lugares.
Este era el caso de Antonio Villarreal, un comerciante con más de 15 años trabajando en el jirón Carabaya, en el Centro de Lima, quien hasta antes de la apertura de las rejas se mostraba preocupado porque su negocio de camisetas se había visto perjudicado por las rejas que impiden el tránsito en la Plaza
“Anteriormente vendíamos 200 polos y ahora no llegamos ni a 30 prendas. Es por eso que nuestras ventas están en decadencia”, expresó.
