EN ASAMBLEA ABIERTA EN FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES
Increíblemente, se trata de un profesional vinculado a ONG proaborto y a investigaciones contra la violencia sexual.
Los casos de presunto acoso y hostigamiento sexual contra alumnas de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP) continúan saliendo a la luz y causando indignación, sobre todo por la presunta inacción de las autoridades académicas de dicha casa de estudios frente a los primeros indicios.
Como señalamos en un informe anterior, la situación explotó a inicios de agosto gracias a una asamblea abierta que se llevó a cabo en la Facultad de Derecho para tratar estos temas. Pues bien, una actividad del mismo tipo se llevó a cabo en la Facultad de Ciencias Sociales este jueves, y lo que allí se conoció ha dejado sorprendido a más de uno.
La asamblea estuvo encabezada por la decana de esa facultad, Patricia Ruiz Bravo, quien ocupa dicho cargo desde el 2017. La idea del evento era conocer las acciones que se están realizando para prevenir actos de hostigamiento y acoso sexual, así como recibir propuestas para prevenir este tipo de actos y sancionarlos.
Como parte de la dinámica, se abrió una ronda de preguntas entre los asistentes. Una de ellas, alumna egresada, preguntó de manera directa sobre la situación de un docente en particular, Jaris Mujica Pujazón, de la especialidad de Sociología, a quien se le cancelaron las horas académicas para el semestre 2018 II.
En su intervención, la joven empieza señalando que desde hace un tiempo ya corrían rumores de que el docente presuntamente incurría en estos actos, y que además tenían conocimiento de que, a raíz de eso, había sido apartado de Promsex, la ONG –de tendencia proabortista- en la que se desempeñaba como investigador asociado.
“Las víctimas tienen todo el derecho del mundo a guardar su privacidad… [Pero] qué implicancias ha tenido eso en la PUCP, nos preocupan nuestras compañeras, él [Mujica] ha sido premiado por el Vicerrectorado Académico este mismo año”, señala la egresada, y puntualiza que su investigación fue, irónicamente, sobre temas de violencia de género.
En efecto, Mujica es licenciado en Antropología, magíster en Ciencia Política y ha recibido diferentes premios por sus libros e investigaciones publicadas en diferentes campos, como la corrupción, el crimen y violencia sexual. Llama la atención esto último, pues se dice que una de las denuncias en su contra sería por violación, aunque en la asamblea no lo quisieron confirmar.
Lo que sí dijo el jefe del Departamento de Ciencias Sociales, Alejandro Diez Hurtado, es que se le ha abierto una investigación “al profesor mencionado” (ni quiso decir su nombre). “No estoy en condiciones de decir las medidas que hemos tomado al respecto [contra Mujica], pero las hemos tomado”, fue otra de las vagas frases que utilizó la autoridad académica para referirse al caso de este docente.
Miradas incómodas
Otra de las alumnas presentes tomó el micro para referirse al caso de su amiga, que por razones de tiempo no había podido estar presente y además porque prefería mantener el anonimato, por temor a represalias.
Según contó la joven, los hechos ocurrieron en la sala de embarque del aeropuerto, donde la víctima se cruzó con Mujica, quien “no dejaba de observarla de manera incorrecta”. Agregó que las cosas se complicaron al bajar del vuelo, ya que el profesor intenta esta vez acercarse a la joven –que no es de Sociales sino de otra facultad-, que en ese momento estaba sola.
Sin embargo, sobre la presunta denuncia de violación contra Jaris Mujica hasta el momento no se conocen mayores detalles. Este sería el motivo por el cual la universidad no podría ejercer sanciones contra él, ya que el hecho no habría sido denunciado formalmente y además habría ocurrido fuera del ámbito de la universidad, hace unos dos años.
Lo que sí debió ocurrir –como dijo la alumna egresada en su intervención- es una acción cautelar conforme lo establece uno de los artículos de la Ley Universitaria.
Esta señala que, si un docente es sospechoso de haber cometidos contra la libertad sexual, este debe ser apartado de la casa de estudios como medida preventiva, sin perjuicio de las sanciones que se puedan establecer posteriormente.
Lo llaman violador
En redes se viralizó una protesta de las alumnas de la Facultad de Ciencias Sociales de la universidad, posterior a la asamblea del jueves. En uno de los patios de la universidad, gritaron al unísono: “dilo, se llama Jaris Mujica, y es un violador”, a manera de protesta. Como se sabe, en las redes hay gran indignación entre la comunidad PUCP por el silencio bajo el cual se tratan estos temas, en lugar de visibilizarlos para hacer de la universidad un lugar seguro.