El Senamhi advierte que la disminución del nivel del agua del lago Titicaca ha superado los 62 centímetros
La evaporación del agua del lago Titicaca se ha intensificado en agosto y septiembre debido al déficit hídrico y al aumento de la temperatura que afecta a la región de Puno, según afirmó Sixto Flores Sancho, jefe de la oficina del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) en Puno.
El experto detalló que, durante el mes de septiembre, la disminución del nivel del agua del lago Titicaca ha superado los 62 centímetros desde el primero de abril hasta la fecha. Esta situación se debe a la ausencia de lluvias en el altiplano puneño, provocada por el Fenómeno El Niño costero.
El funcionario afirmó que esta preocupante disminución del nivel del agua ha superado el récord registrado en diciembre de 1996. Por esta razón, advirtió que la situación podría empeorar en lo que queda del año 2023 si no se produce una mejora en las condiciones climáticas.
Flores Sancho señaló que este inconveniente tuvo inicio con el Fenómeno El Niño costero y añadió que con la confirmación del Fenómeno El Niño a nivel global, se espera un agravamiento de los problemas ambientales en el departamento.
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El portavoz del Senamhi anticipó que las lluvias serán escasas en el último trimestre. «No llegarán al 100 % como deberían. (…) Los indicadores indican que estamos en una situación de sequía», afirmó.
Se aclara que el departamento de Hidrología del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) en Bolivia toma como referencia el nivel en Arica en relación con el lago Titicaca, mientras que Senamhi Perú utiliza como referencia el nivel en Matarani, con una diferencia de 70 centímetros. No obstante, la medición se efectúa utilizando el mismo sistema métrico de metros, centímetros y milímetros para el nivel del agua.
Cultivos en riesgo
Por otro lado, se advierte que seis productos alimenticios del altiplano puneño están en peligro debido a la sequía, según informes de Estadística e Informática de la Dirección Regional Agraria (DRA) de Puno. Esto se debe a que el 99 % de la superficie de cultivo depende de las precipitaciones pluviales.
El director de estadística e informática de DRA, Germán Cutipa Flores, detalló que los productos en riesgo de cultivo son: quinua, haba, cebada, olluco, mashua y oca, debido a la escasez de lluvias en el altiplano.
«Si no se registran lluvias en octubre, es muy probable que no se pueda llevar a cabo la siembra», expresó, y añadió que la campaña agrícola del periodo 2023-2024 se verá afectada, lo que tendrá consecuencias negativas para los agricultores de la región de Puno.
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