El mandatario Vladimir Putin, confirmó el inicio de la fabricación en serie del nuevo misil balístico “Oreshink”, asegurando que un supuesto bombardero masivo con este tipo de proyectiles, equivaldría al lanzamiento de una bomba nuclear.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, manifestó que la producción en serie del nuevo misil balístico hipersónico “Oréshnik”, utilizado por primera vez durante la semana pasada tras un ataque contra una fábrica militar ucraniana, ya ha comenzado.
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«La producción en serie de ‘Oréshnik’ ha comenzado», mencionó el jefe del Kremlin en Astaná, donde asiste a una cumbre de la alianza militar postsoviética Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
En esa línea, Putin, instó en que Rusia “se vio obligada” a probar el nuevo misil en condiciones de combate “en respuesta a ataques con armas occidentales contra el territorio de las regiones de Briansk Kursk”. Sin embargo, mencionó que se refiere a los ataques con misiles estadounidenses ATACMS y británicos Storm Shadow que golpearon infraestructuras militares rusas en diversas ocasiones durante los últimos diez días.
«A pesar de nuestras advertencias sobre el peligro de una escalada del conflicto, se llevaron a cabo ataques contra nuestro territorio«, indicó el jefe del Kremlin.
Asimismo, recordó que Rusia ha advertido en repetidas ocasiones de que los ataques con armas de largo alcance occidentales significarían “la participación directa” de países de la OTAN en el conflicto armado en Ucrania, “ya que el uso de esas armas sin la participación directa de personal militar y especialistas de los países de la OTAN es simplemente imposible”.
