El consumo de tussi aumenta en espacios nocturnos y preocupa a especialistas por sus efectos físicos y mentales.

En los últimos años, el tussi se ha posicionado como una de las drogas recreativas más presentes en fiestas y eventos nocturnos. Su circulación entre jóvenes ha encendido alertas en el sector salud debido a la desinformación sobre su composición real y sus consecuencias a corto y largo plazo.

¿Qué es el tussi y por qué se consume en fiestas?

El tussi, también conocido como “cocaína rosa”, es una sustancia ilegal asociada al consumo recreativo en discotecas y reuniones privadas. Su uso se vincula a la búsqueda de euforia, desinhibición y mayor resistencia al cansancio, lo que facilita su presencia en espacios de ocio nocturno.

Componentes del tussi

Especialistas advierten que el tussi no tiene una fórmula fija. Su composición puede variar según el productor y el lote. Entre las sustancias detectadas con mayor frecuencia se encuentran:

• Ketamina

• MDMA

• Anfetaminas

• Cafeína

• Colorantes artificiales

Esta mezcla impredecible incrementa los riesgos para la salud, ya que el consumidor no conoce la dosis ni los componentes exactos.

Efectos del tussi en el organismo

El consumo de tussi puede generar efectos inmediatos y progresivos. Entre los más reportados se encuentran:

• Aumento de la frecuencia cardíaca

• Alteraciones de la presión arterial

• Ansiedad y confusión

• Náuseas y mareos

• Cambios en la percepción y el estado de ánimo

En algunos casos, se han registrado episodios de pánico, deshidratación severa y pérdida de conciencia.

Consecuencias del tussi en la salud

Médicos y especialistas señalan que el uso repetido de tussi puede provocar:

• Riesgo de dependencia psicológica

• Daño al sistema nervioso

• Trastornos del sueño

• Problemas de memoria y concentración

• Mayor probabilidad de intoxicación o sobredosis

La combinación con alcohol u otras drogas potencia estos efectos y eleva el peligro.

Recomendaciones médicas ante el consumo de tussi

Profesionales de la salud recomiendan:

• Evitar el consumo de tussi por su composición desconocida

• No mezclarlo con alcohol u otras sustancias

• Buscar atención médica inmediata ante síntomas intensos

• Promover la información y prevención en espacios educativos y familiares

La detección temprana y la orientación profesional son claves para reducir riesgos.

El avance del tussi en entornos juveniles plantea un desafío para las autoridades, el sistema de salud y la sociedad en general. La información clara sobre sus componentes, efectos y consecuencias resulta fundamental para la prevención y la toma de decisiones informadas.