Extorsiones con explosivos y asesinatos generan temor en la capital.
El alcalde de Lima Metropolitana, Rafael López Aliaga, calificó de ‘terrorismo urbano’ los crecientes casos de extorsión y violencia que azotan la capital peruana. Denunció el impacto de estos crímenes, que incluyen asaltos, asesinatos y el uso de explosivos.
La declaración se realizó durante la entrega de 549 motocicletas a la Policía Nacional, una iniciativa destinada a reforzar la presencia policial en las calles y mejorar la seguridad en la ciudad.
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López Aliaga expresó su desacuerdo con el reciente cambio en la normativa que buscaba tipificar el ‘terrorismo urbano’ como delito en el Código Penal. El Congreso modificó la denominación a ‘criminalidad sistemática’ y aprobó en primera votación una ley que establece cadena perpetua para quienes cometan actos de extorsión recurrente utilizando artefactos explosivos.
Sin embargo, el alcalde afirmó que, aunque el Congreso intente denominarlo de otra manera, estos actos continúan siendo ‘terrorismo urbano’.
“Vamos a vencer, esto se llama terrorismo urbano, por más que le pongan otro nombre, pero es terrorismo urbano. No es normal que a una persona le pongan una granada, que la estén asustando con llamadas anónimas, dejándole mensajes, que maten a alguien en un colegio; eso es terrorismo y crear terror”, Mencionó Rafael López Aliaga
Propuesta que indigna a bodegueros
Durante una reciente conferencia de prensa, el alcalde de Lima sorprendió al enfatizar una propuesta que, según los propios bodegueros, no contribuiría a reducir la delincuencia en una ciudad que, cabe destacar, se encuentra en estado de emergencia.
‘Toda licencia otorgada en Lima Metropolitana deberá obligar a la persona que la recibe para una bodega, farmacia o barbería a contar con dos cámaras de seguridad, integrando esa información a nuestro sistema de inteligencia artificial’, indicó.
