Comisión de Ética concluye que Merino no infringió ningún principio ético desarrollado en el Reglamento
La Comisión de Ética rechazó en su última sesión la denuncia en contra del presidente del Congreso, Manuel Merino, por los contratos que vinculan a tres de sus familiares con el Estado, mientras se desempeñaba como parlamentario entre los años 2011 y 2016.
La denuncia presentada contra Merino por los contratos a sus familiares fue considerada por la Comisión como hechos no realizados por el legislador y mencionó que “no tiene competencia para pronunciarse”, siendo declarada improcedente por unanimidad.
“En consecuencia, de la evaluación de la denuncia periodística y los descargos presentados, se puede concluir que no se ha infringido ninguno de los principios éticos contenidos en el CÓDIGO y desarrollados en el REGLAMENTO, ni los deberes de conducta establecidos en el artículo 4 del CÓDIGO.”, se lee en el extracto del informe de calificación obtenido y publicado por La República.
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Por otro lado, el grupo de trabajo declaró procedente la denuncia interpuesta al congresista Edgar Alarcón donde se le culpa de solicitar las hojas de vida de los auditores que elaboraron el informe sobre sus declaraciones juradas.
Según el informe de calificación, este acto se cometió tras la advertencia de la Contraloría General de la República, a finales de junio, por las irregularidades presentadas en dichas declaraciones.
Para la aprobación de la denuncia contra el también presidente de Fiscalización se tuvo cinco votos a favor y una sola abstención de la congresista María Bartolo Romero, quien forma parte del mismo partido político de Alarcón.