Según el gobierno británico, Vladimir Putin ha “desplegado una gran riqueza injustificada”.
El camino más veloz para minimizar el “lujoso estilo de vida” de Vladimir Putin es visitar por la “camarilla” que le circunda, ha explicado este viernes el régimen del Reino Unido al anunciar una totalmente nueva batería de sanciones económicas, que incluirá a la exmujer del mandatario ruso, su amante, y un conjunto de parientes. Putin fue vinculado, por medio de diversas informaciones, con un yate valorado en bastante más de 650 millones de euros, o un palacio en la costa del océano Negro con un coste de casi 1.200 millones, aunque su dueño oficial sea Arkady Rotenberg, quien ya ha sido sancionado por las autoridades británicas en el último mes del año de 2020.
“El patrimonio proclamado de manera oficial por Putin es modesto, y su estilo de vida es financiado por una camarilla de parientes, amigos y miembros de la élite [rusa]”, explica el reportado que ha anunciado los nombres y puestos de los nuevos sancionados. Según los documentos del Kremlin, dice el Ministerio de Exteriores del Reino Unido, el mandatario ruso tiene un diminuto apartamento en San Petersburgo, 2 automóviles de la época soviética y un diminuto garaje.
La exesposa del presidente ruso, Liudmila Ocheretnaya, se divorció de él en 2014. Comparten 2 hijas, María, de 37 años, y Katerina, de 35. Resultan muy raras sus apariciones públicas, como ya lo eran antecedente de que el matrimonio se deshiciera.
A partir de entonces, “se ha beneficiado de colaboraciones empresariales preferenciales con entidades públicas del Estado, y ha desplegado una gran riqueza injustificada”, ha asegurado el régimen del Reino Unido, que estima a Ocheretnaya “una socia cercana de Putin, que recibe beneficios materiales o financieros de esta relación”. Esos de sus activos a los que logre entrar el gobierno de Johnson van a ser congelados, y se le impondrá una prohibición de viajar al Reino Unido.
