Recordó a las economías desarrolladas que la migración es una ganancia neta y un impulso para la fuerza laboral
El Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular permitirá a los Estados miembros realizar una política de este sector “basado en los hechos y no los mitos”, aseguró Louise Arbour, Representante Especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al clausurar el exitoso evento que se realizó en Marrakech.
Esta es una clara alusión a los países que optaron no firmar el pacto como Estados Unidos, Hungría, Austria, Israel, República Checa, Eslovaquia, Polonia, Lituania, Australia, República Dominicana y Chile. Estos países sostienen que el documento aprobado quita soberanía a los Estados para decidir políticas migratorias.
La representante de la ONU destacó que el pacto está diseñado para proteger los intereses nacionales, al mismo tiempo, permitirá una mayor colaboración entre los Estados. “De esta manera, mejorará la seguridad y el orden en la gestión de este problema social y reducirá las rutas migratorias peligrosas”, añadió.
Arbour destacó que al ser un pacto no viculante, se refuerza la promesas que los migrantes de todas partes del mundo serán tratados con dignidad y equidad.
En otra parte de su intervención, la Alta Comisionada invitó a los países que no firmaron el acuerdo a reconsiderar su posición. “Les insto a que lo lean con cuidado y, por supuesto, formen su propia opinión. Al hacerlo, escuchen el hecho de que el Secretario General ha respondido los mitos uno por uno».