El portavoz del ejército ucraniano señala que el ataque de Rusia deja 35 muertos y 134 heridos.
La ofensiva de Rusia sobre Ucrania se acerca cada vez más al territorio de la Alianza Europea. La milicia rusa arrojó en la madrugada del domingo 30 misiles contra una base militar de Ucrania situada en la zona de Lviv, en el oeste de la nación, a tan solo unos 25 kilómetros de la frontera con Polonia, un territorio integrante tanto de la UE como de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, según confirmaron las autoridades militares del territorio.
Se trata del Centro para el Mantenimiento del bienestar y la Estabilidad Mundiales, una instalación de entrenamiento militar situada en el poblado de Yavoriv que ha recibido visitas de diferentes delegaciones de la Unión Atlántica. El gobernador del territorio de Lviv ha señalado que el ataque ha provocado por lo menos 35 muertos y 134 lesionados, a medida que el ministro de Protección de Ucrania, Oleksii Reznikov, ha reportado de que en la instalación había “instructores extranjeros”.
Con este bombardeo, el mandatario ruso, Vladímir Putin, no solo redobla su amenaza a Ucrania, sino que endurece su pulso con la Alianza Europea y la Organización del Tratado del Atlántico Norte un día luego de que la UE expresara su intención de mandar al territorio cada una de las armas que sean correctas. Moscú ha destinado el abasto de armamento a Kiev como “objetivo legítimo”.
Un portavoz de las Fuerzas Armadas de Ucrania ha apuntado que el ataque golpeó una de las unidades militares de la base de Yavoriv. Es una de las instalaciones de adiestramiento militar mayores de la nación, con 360 kilómetros cuadrados. Se ha dedicado básicamente al entrenamiento de tropas ucranias y es donde se realizaron la mayor parte de los programas de formación con territorios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Se puso en marcha en 2007 para ejecutar a los militares ucranios, más que nada esos con el propósito de misiones de Tranquilidad de las naciones unidas internacionalmente, según fuentes de Protección. Hace 5 días, el mandatario, Volodímir Zelenski, hizo saber que retiraba a los militares de su territorio desplegados en esta clase de misiones para lograr afrontar a la invasión rusa.
La instalación militar atacada además ha recibido visitas de las delegaciones de la Unión Atlántica, según información del organismo de cooperación militar, y suele admitir a tropas de todo el mundo, que aprenden ahí capacidades como la evacuación de minas para misiones de tranquilidad. Ucrania no es integrante de la Organización del Tratado del Atlántico Norte —a la que aspira a entrar a partir de que recibió la invitación en 2008—. Su membresía es una de las líneas rojas esgrimidas por el Kremlin para justificar la invasión.