Víctor Hugo Quijada Tacuri
La izquierda actual ha aprendido otras formas para obtener y mantener el poder, ya no recurren a la revolución, violencia y al autoritarismo, desde la caída del muro de Berlín han aprendido que hay formas más sutiles para capturar y conservar el poder.
Es conocido en Latinoamérica el caso de Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua. Esto no es nada más que una forma de hacer geopolítica por parte de China y Rusia en nuestro continente desde el Foro de Sao Paulo, básicamente por intereses económicos y políticos.
Para el caso del Perú, el grupo Velasquista y discípulos ha intentado siempre aplicar su ideología, incluso con Alberto Fujimori, ya no se acuerdan los de izquierda que lo llevaron al poder, para luego opacarlo de la forma más baja y traicionera ya conocida.
Desde su caída, la izquierda conocedora del caudillismo histórico y el oportunismo político de nuestro país, como de un sector de derecha que es desarticulada y poca inteligente, han sabido llegar al poder usando e influenciando medios de comunicación, grupos económicos, copando instituciones, incentivando el odio y la división, manejando el sistema de justica, los órganos electorales.
También utilizan a nuestra población poca instruida (gracias a que ellos manejan el sector educación) y a los jóvenes que son muy emotivos para sus fines perversos, siempre usan el mismo discurso y pretexto: La lucha contra la corrupción, los derechos de las mujeres, de los campesinos, de los LGTB, de los discapacitados, de las minorías en general, se hacen pasar por ovejas cuando son lobos.
Es cierto que en nuestro país hay muchas desigualdades, el problema es que el grupo de poder actual usa esos problemas como una oportunidad para hacer política, la mayoría de gente no ve más allá de lo evidente, no se dan cuenta que sus vidas están siendo o intentando ser controladas por completo.
Al mismo estilo de China, me atrevería a decir que incluso nunca van a cambiar el modelo económico del todo, porque este modelo les permite tener una población atada al sistema, sino esa discusión es uno de sus pretextos más para incentivar la división y la indignación ciudadana. Lo que ellos desean en el fondo es centralizar el poder económico en ellos y sus allegados.
Entonces, cuál es el rol de la oposición, es lamentable ver que solo hay partidos que se dejan llevar por la coyuntura, no solo son vientres de alquiler, sino que, por tratar de mantener sus negocios personales, tranzan con el gobierno de turno para seguir obteniendo réditos económicos.
El grupo de poder actual usa a la democracia para sus fines, para llegar a sus objetivos, en donde la oposición debe de actuar con mucha astucia, inteligencia, unidad y organización, dejarse de viejas argollas, personalismos y mezquindades que no llevan a ningún lado, al final todos perderemos.
Si se dan cuenta, así lo vaquen al señor Castillo en estos días, el problema subsistirá, el problema no es como ellos quieren hacernos ver que solo algunas personas están mal, el problema es de raíz, y pasa no solo por vacar al presidente, donde el Congreso debe asumir su rol, el problema va más allá, por extirpar por completo de nuestro Estado, hacer reingeniería, a toda esa clase política de izquierda progresista, sino se volverá a repetir la misma historia donde ya se ha vuelto un círculo vicioso.