Este primate endémico de la región se encuentra en peligro crítico de extinción debido a la deforestación, la caza y el tráfico ilegal, mientras proyectos locales buscan salvarlo.
En los frondosos bosques del Alto Mayo, en San Martín, habita un pequeño primate conocido como el mono tocón (Callicebus oenanthe). Este tímido animal, cuya característica melena blanca rodea su rostro, es endémico de esta región peruana. Sin embargo, su futuro es incierto: la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) lo cataloga como una de las 25 especies de primates más amenazadas del mundo.
El mono tocón, que mide alrededor de 60 centímetros y pesa un kilogramo, enfrenta múltiples amenazas. Su hábitat se ha reducido drásticamente a menos de 5,000 kilómetros cuadrados debido a la deforestación masiva para actividades ganaderas y agrícolas, intensificadas desde los años 80. Este aislamiento fragmenta las poblaciones y limita el intercambio genético necesario para su supervivencia. Además, la caza para consumo, el tráfico ilegal como mascota y la falta de conciencia sobre su importancia ecológica agravan su situación.
Características y hábitos del tocón
A diferencia de otros primates, el mono tocón no utiliza su cola como una extremidad prensil. Su dieta consiste en frutas (45%), insectos (39%), y ocasionalmente semillas, flores y brotes. Vive en pequeños grupos familiares, mostrando un comportamiento monógamo. Estudios recientes han identificado variaciones en su coloración, lo que podría estar relacionado con su distribución geográfica.
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Esfuerzos de conservación
En medio de esta crisis, iniciativas como el Proyecto Mono Tocón, activo desde 2007, luchan por preservar la especie. Este programa, impulsado inicialmente por la asociación francesa Le Conservatoire pour la Protection des Primates, combina investigación científica con programas educativos y participación comunitaria en áreas como Calzada y Yantaló.
El proyecto también busca sensibilizar a las comunidades locales sobre la importancia del tocón para el ecosistema, destacando su papel en la dispersión de semillas y el mantenimiento de los bosques.
Un llamado a la acción
La preservación del mono tocón depende de la colaboración entre organizaciones, comunidades y autoridades. Proteger los últimos fragmentos de su hábitat y promover prácticas sostenibles son pasos clave para asegurar el futuro de este diminuto pero valioso habitante de los bosques peruanos.