El economista Santiago Peña asumió el cargo de presidente de Paraguay el martes, iniciando su mandato para el período 2023-2028
A las 8:47 hora local (12:47 GMT), Santiago Peña fue investido como presidente tras prestar juramento ante Silvio Ovelar, presidente del Congreso. Previamente, Pedro Alliana, el vicepresidente, también prestó juramento en la Explanada de la Bahía del Palacio de López, donde había una multitud de invitados.
En su discurso de investidura, el recién asumido presidente de Paraguay, Santiago Peña, expresó que su país tiene un papel destacado que desempeñar en el escenario internacional, en medio de tensiones globales relacionadas con el acceso al agua, la seguridad alimentaria y la autosuficiencia energética.
«Al ser Paraguay una potencia en esos tres grandes temas, estamos llamados a ser protagonistas en el concierto de las naciones», declaró Peña poco después de asumir el cargo, durante una ceremonia que tuvo lugar en frente del Palacio de López, la residencia presidencial, y que contó con la presencia de numerosos invitados.
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Compromiso de Integración y Cambio en Paraguay
Además, subrayó el compromiso de su país por despojarse de su imagen de «isla rodeada de tierra», término acuñado por el escritor local Augusto Roa Bastos para describir a Paraguay, y anticipó la aspiración de convertirse en el epicentro de la integración en América del Sur.
En esa dirección, identificó como uno de los objetivos estratégicos fundamentales el fortalecimiento del funcionamiento del Mercosur, la alianza conformada por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.
«Reconocemos los avances logrados en la senda de la integración, pero no es suficiente, debemos avanzar con audacia y determinación», afirmó, destacando la presencia de sus pares de Argentina, Brasil, Uruguay y Bolivia.
La investidura de Peña tuvo lugar tras su juramento ante Silvio Ovelar, presidente del Congreso, alrededor de las 8:47 hora local (12:47 GMT).
Previamente, Pedro Alliana, el vicepresidente, también realizó su juramento en la Explanada de la Bahía del Palacio de López, donde se congregaron más de un centenar de delegaciones extranjeras, encabezadas por seis líderes de Estado, incluyendo al rey Felipe de España.
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