Se develó que el cliente el cual recibió tres disparos en San Miguel contaba con un registro de extorsión y robo agravado, según la PNP se trataría de un ajuste de cuentas
Pocas horas después del asesinato del exsuboficial superior PNP retirado César Pascual Quegua Herrera (62) en un restaurante reconocido de San Miguel, la Policía determinó que el objetivo del sicario que lo ejecutó fríamente era eliminar a un cliente con un largo historial delictivo por extorsión y crímenes contra el patrimonio.
Las grabaciones de las cámaras de seguridad son impactantes: el sicario, Anderson Junior Vera Burga (22), solo tardó 27 segundos en llevar a cabo el homicidio.
El perpetrador descendió de una motocicleta y disparó tres veces contra José Seminario Cárdenas, quien estaba con amigos en una de las mesas principales del restaurante El Tronco, ubicado entre las avenidas La Marina y Faucett.
Sin pronunciar una palabra, se acercó al cliente y lo agredió. Uno de los disparos rozó su ojo, otro penetró en su muslo y otro lo alcanzó en los genitales. «Este sujeto está internado en un hospital con custodia policial«, afirmó el coronel Arlyn Gallardo, líder de la División Policial Oeste.
Para los investigadores, no hay incertidumbre de que el incidente fue un ajuste de cuentas dirigido específicamente contra José Seminario.
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No obstante, de manera lamentable, el ex policía, que ejercía como guardia de seguridad en el lugar, fue asesinado al intentar detener al criminal contratado. También sufrió tres disparos.
La detención de Vera Burga, con historial previo por robo y hurto agravado, así como por intento de secuestro, facilitará la identificación de la(s) persona(s) que ordenaron el homicidio de Seminario, quien se encuentra en estado grave.
Ayer, las autoridades judiciales registraron la residencia del asesino en busca de un teléfono móvil que pudiera ser desbloqueado para acceder a posibles evidencias relacionadas con los individuos que lo contrataron como asesino.
El sicario fue detenido a una corta distancia del sitio donde perpetró el homicidio. Los residentes mencionaron el caso del asesinato múltiple de Israel San Román, conocido como La Tota, y su familia, que ocurrió en las cercanías.
Se encontró una de las dos motocicletas utilizadas por los sicarios abandonada en la cuadra 14 de la avenida La Marina. Expertos en criminalística tomaron las huellas dactilares para su análisis.
