Por: Fernando Calle Hayen
La tercera vía tiene una historia que data desde el siglo XIX tal vez quizás antes. Se le ha dado esta interpretación a muchas aproximaciones teóricas y propuestas políticas que tienen que ver con el sistema de mercado, la posición del capitalismo, el camino del socialismo, el marxismo-leninismo e incluso temas que tenían que ver con las condiciones de Samuelson. Asimismo, paralelamente, en lo que más nos preocupa hoy día que es la profundización de la democracia. Por esta razón, atrevidamente con mucho amor, pienso quela solución del APRA pasa por una tercera vía.
Resulta interesante, porque ahora seguramente los que son antiapristas -últimamente contentos- dirán que Fernando Calle está tratando de beneficiar su concepción doctrinaria, pero es que yo les sugeriría que vayan a las fuentes de los términos, incluso a Rosa de Luxemburgo, incluso al propio Marx que nos señalaba que el capitalismo sería destruido por las mismas fuerzas que lo crean y mantienen.
Las palabras del Papa Pío XII, según John Browning, el cual estaba abogando por esta creación de la tercera vía, se refería hacia un camino entre el socialismo y el capitalismo a fines del siglo XIX. Haya de la Torre, en el Congreso de Bruselas de 1927, en el debate con Juan Antonio Mella sentó -claramente- las diferencia entre la internacional comunista y el aprismo.
Después de esta interpretación del Congreso de Bruselas, Haya de la Torre ratifica que el aprismo es para de los pueblos de América Latina -Indoamérica- y con un análisis sencillo menciona, que:“mientras que para los países desarrollados el Imperialismo es la última etapa del capitalismo, para los nuestros es la primera etapa”.
APRA tiene como su primer punto máximo la acción contra el Imperialismo Yanqui. Esto se observa en la obra “El antiimperialismo y el APRA”; posteriormente, viene otro como es “Treinta años de Aprismo”, donde evolucionamos hacia la acción contra todo tipo de imperialismo.
Cuando hablamos de la tercera vía con filosofías desarrolladas en el campo tecnológico y de la educación, encontramos que ese sentimiento de buscar una posición equidistante tanto del comunismo como del capitalismo, proviene de la extraordinaria expresión multitudinaria, del sentimiento del jefe, del fundador, del guía Víctor Raúl Haya de la Torre, sosteniendo al medio o al final de sus discursos “NI CON WASHINGTON NI CON MOSCÚ, SOLO EL APRISMO SALVARÁ AL PERÚ”.
Sin embargo, no como una concepción sectaria de que el partido pueda ser el único en definir la situación económica y política del Perú, diría más allá, identificando la posición ideológica en el sentido de que, en tiempos anteriores y actuales, se iba a las situaciones equidistantes del capitalismo con el comunismo, que el aprismo era y es la solución.
Por esta razón, sostengo que la tercera vía en el aprismo es la lucha frontal contra la impunidad. Asimismo, que el propio aprismo lo diga; no se puede vivir en una posición entre dos personas o dos grupos, tiene que existir esta tercera vía que es la vía de los militantes, la de las bases con su sentimiento hacia el reencuentro con su auténtica ideología, sus valores y su auténtica solvencia moral para enfrentar el reto del Siglo XXI. NO A LA IMPUNIDAD,
(*) Facebook: Fernando Calle Hayen.
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