Un punto del PBI genera 60 mil empleos, señala exministro
Todo esto también está relacionado con el aumento de la pobreza, que se inició en el gobierno de Ollanta Humala.
REDACCIÓN
Sin duda, las cifras económicas son el principal factor para la reducción del trabajo formal en el Perú, bajó en 2.5% de enero a marzo, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Para el exministro de Trabajo Jorge Villasante, el decrecimiento de nuestra economía hace que aumente el trabajo informal en nuestro país, ya que no se genera trabajo suficiente para la Población Económicamente Activa (PEA)
“Yo creo que la principal causa del descenso del empleo en el país, y principalmente en Lima, es producto de la situación económica del país. Obviamente si crecemos menos, que es lo último que ha venido ocurriendo en los últimos años, desde el gobierno del señor Humala, obviamente no se genera la suficiente cantidad de empleo como para absorber la demanda de los jóvenes que ya están en la”, indicó para LA RAZÓN, el exministro.
En ese sentido explicó que para que los jóvenes que se incorporan al mercado laboral anualmente –que se estima en 360 mil– tengan empleo se supone que la economía debe crecer en un 6%, porque se estima que un punto del PBI más o menos genera 60 mil puestos de trabajo. Otro factor que influye, dijo, es la gran cantidad de subempleo, cuando se trabaja 4 horas o menos, o cuando un profesional trabaja en ocupaciones distintas a la de formación.
Villasante además consideró que las cifras que hace unos días se mostraron sobre la informalidad son producto del bajo crecimiento que muestra el país desde el gobierno de Ollanta Humala, lo que también ha traído un preocupante aumento de la pobreza, lo que no ocurría hace 18 años.
LLEGA A UN 73 %
Para el decano del Colegio de Sociólogos del Perú (CSP), Roberto Rodríguez Rabanal, el empleo informal alcanza el 73 % del mercado laboral en Perú, uno de los índices más altos en América Latina.
En ese sentido analizó las razones por las que se llega a estas cifras en nuestro país. Pese a que preocupa la informalidad, valoró los aportes de los negocios informales a la economía peruana porque dinamizan la producción, la comercialización, los servicios y la generación de empleos.
“En promedio, el 5 % de los microempresarios acceden a créditos a una tasa aproximada del 33 %; en cambio, aquellos que pertenecen a la gran empresa, el 100 % obtiene ese crédito a un 5 % o 6 %”, anotó para ilustrar las dificultades que enfrenta el sector.
Sin embargo, considera que, pese a su valioso aporte a la economía peruana, lo mejor en un futuro próximo sería que se lleguen a formalizar estas actividades para beneficio del sector y del propio país. “No se trata de que la economía informal vaya a ser la alternativa, creo que hay que ser cuidadosos con eso y debería ser dinamizada con todas las facilidades del caso”, opinó.
Por su parte, el economista Elmer Cuba sostuvo que durante el 2017 se generaron alrededor de 300,000 puestos de trabajo formales; sin embargo, al mismo tiempo se crearon 400,000 puestos en la economía informal.
Según las investigaciones del representante de Macroconsult, cada 120,000 empleos nuevos que se crean en este país representan un promedio de un punto adicional en el crecimiento de la economía peruana.
OTRAS CAUSAS
Hay otros factores que también influyen, para el crecimiento del trabajo informal en nuestro país, no tan determinante, pero que con el tiempo la estadística puede variar.
Actualmente son casi 200 mil venezolanos los que han llegado al Perú ante la crisis política, económica y social que viven con el gobierno de Nicolás Maduro, cifras que se asemeja a la presencia de estos en otros países de la región.
Para nadie es un secreto que los venezolanos muchas veces piden mucho menos del sueldo mínimo (S/ 930), y a ello se le agrega que no tienen ninguna exigencia respecto a los mínimos beneficios laborales que un peruano exigiría a su empleador, pues las leyes lo protegen en ese sentido. Esto despierta el apetito de muchos empresarios, y micro empresarios, que ve algo más de ingreso al dejar de lado algunos derechos laborales para su empleado.
Al respecto, Jorge Villasante considera que de alguna manera la gran presencia de venezolanos en el mercado laboral –sobre todo de Lima– definitivamente influye en las cifras de informalidad en el mercado, pues estos no exigen lo que les correspondería en una situación normal.
“Algo que es natural en cualquier parte, cuando se reemplazan trabajadores, normalmente el migrante acepta condiciones menos favorables a las que podría exigir un peruano (…) Puede recibir menos sueldo, puede aceptar no estar en planilla, el tema de salud puede ver cómo los afronta, y en el tema de pensiones, ese trabajador difícilmente puede tener como prioridad aportar al sistema de pensiones, que obviamente sí lo hace un trabajador formal”, dijo.
