Paro contra la criminalidad afecta transporte público y centros educativos en la región. Entidades públicas brindan tolerancia horaria a sus trabajadores.
Un paro de 24 horas convocado por los gremios de transportistas en La Libertad, en protesta contra la creciente criminalidad, ha obligado a suspender las clases en cinco provincias de la región. La medida afecta principalmente a las provincias de Trujillo, Virú, Ascope, Pacasmayo y Chepén, donde las calles lucen vacías debido a la paralización del transporte público.
La protesta, que busca llamar la atención sobre el incremento de la violencia y el sicariato, ha sido acatada por más de 15 mil vehículos, entre microbuses y combis. Solo algunos taxis se movilizan por las calles de Trujillo, mientras que las empresas de transporte urbano han paralizado casi en su totalidad. En tanto, las autoridades de las principales universidades de Trujillo han optado por pasar sus clases presenciales al formato virtual.
Impacto en el transporte y las actividades diarias
Al cierre de la jornada, se constató que el servicio de taxis particulares continuaba operando en Trujillo, aunque varias empresas anunciaron que también se sumarían a la medida de fuerza. Mientras tanto, la situación del transporte interprovincial, que opera principalmente en los márgenes de la ciudad, aún no era del todo clara. Sin embargo, la mayoría de los mercados principales de Trujillo anunciaron su cierre temporal, no en respaldo directo al paro, sino como medida preventiva ante posibles disturbios.
Las entidades públicas, como la Municipalidad Provincial de Trujillo y diversos hospitales, han emitido disposiciones para permitir una tolerancia de dos horas a sus empleados, con el fin de facilitar su desplazamiento ante la falta de transporte.
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Marchas pacíficas y medidas de seguridad
Aunque hasta el momento no se han registrado bloqueos de vías ni actos violentos, los gremios de transportistas han anunciado movilizaciones hacia la Plaza de Armas de Trujillo para presentar sus propuestas y exigir soluciones ante la ola de crímenes que afecta al sector. Las autoridades policiales han asegurado que acompañarán las protestas para garantizar la seguridad y el orden público.
Los dirigentes de los transportistas han subrayado que no permitirán acciones violentas ni alteraciones al normal desplazamiento de aquellos vehículos que no se sumen al paro. El foco de la movilización, aseguran, es visibilizar la situación crítica que enfrenta su gremio y presionar por medidas concretas para combatir la inseguridad que los amenaza a diario.
