Excanciller alerta de intereses subalternos en filtración a tres meses de elecciones
Doctor Tudela, ¿cuál es su posición respecto al caso de corrupción que involucra al Consejo Nacional de la Magistratura (CNM)?
Es un tema muy grande, muy grave. En primer lugar, resulta sorprendente escuchar los diálogos en esos audios, porque muestra pues una gran decadencia humana en el Poder Judicial y en el CNM. En segundo lugar, es inexplicable por qué el fiscal de la Nación (Pablo Sánchez) no fue donde la fiscal que pidió la autorización para las escuchas telefónicas a pedirle las grabaciones íntegras y por qué fue a pedirlas al Instituto de Defensa Legal (IDL). En tercer lugar, cómo el IDL consiguió estas escuchas telefónicas, porque el IDL no es un diario, no es un medio de comunicación, el IDL es un instituto jurídico de protección de derechos humanos, y por lo tanto la reserva periodística y la protección de las fuentes no se aplica al IDL.
Le parece sospechoso…
No le estoy diciendo que sea sospechoso, lo que le estoy diciendo es que acá hay delito, y que hay que determinar cómo esas grabaciones llegaron al IDL. ¿Sobornó a alguien el IDL para conseguirlas? No lo sé, pero hay que investigarlo. Quién es el funcionario que se las entregó, eso tiene que saberse. ¿Es alguien de la policía, es la misma fiscal, es el juez que autorizó esto? Eso tiene que saberse. O sea, hay delitos por todas partes en esta crisis.
¿Qué opina de que haya voces, ligadas al IDL, que piden que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos intervenga ante este caso?
Nada justifica que la CIDH intervenga en un caso cuando las instancias nacionales no han sido agotadas. O sea, no se han agotado las vías internas, recién comienza el tema de los audios, de las escuchas que una fiscal habría pedido a un juez que ordene.
Lo que algunos piden es que intervenga, en alguna medida, en el proceso de selección de jueces y fiscales…
La posición ideológica del IDL es conocida. La razón por la cual piden la intervención –que no procede– de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y de la Corte IDH es para desprestigiar ya definitivamente al sistema judicial peruano. Es una manera de decir “el IDL no confía en ningún juez en el Perú, y por lo tanto esto lo tiene que ver la Corte, porque somos unas víctimas”. Pero el IDL se está victimizando erradamente, porque el IDL no es una víctima, el IDL es el victimario, eso debe quedar muy claro. Ahora, que los jueces que han sido objeto del ataque del IDL parecen ser corruptos, pues tampoco cabe duda, porque los diálogos son diálogos muy reveladores.
¿Quieren mantenernos subordinados al ente supranacional?
Es muy interesante porque con eso abren sus cartas, muestran sus nexos con la Corte Interamericana.