Rusia no tiene interés en llegar a ese extremo, dice experto Suslov
Por: Ricardo Sánchez Serra
Moscú. Entrevistamos a uno de los académicos más prestigiosos de Rusia, Dmitry Suslov, un think tanks del influyente Club Valdai. Miembro del Consejo Ruso de Asuntos internacionales. Es experto en política exterior y relaciones ruso-norteamericanas y ruso-europeas.
– ¿Rusia perdió la guerra de información?
No lo creo. La postura de Rusia hacia al conflicto ucraniano y las relaciones internacionales en general es apoyada por la mayoría global de los países de Asia, África, Medio Oriente y América Latina.
– Ese apoyo a Rusia no se ve en la votación en ONU…
Occidente no quiere que ese conflicto finalice a corto plazo. Al mismo tiempo, las otras regiones mencionadas desarrollan la cooperación con Rusia y coinciden en los temas internacionales a pesar de la Operación Especial, aunque no apoyan el tema militar. Los resultados de la votación en la ONU dependen mucho de la presión de EE.UU. y de los países occidentales. Sobre la guerra de información es evidente que en Gaza hay mucha hipocresía y doble estándar de los países occidentales, que están más aislados que Rusia en su conflicto con Ucrania.
– Muchos critican a Rusia por la Operación Especial, pero no se analiza los antecedentes…
Esa postura de no tener en cuenta los antecedentes es muy cómoda y ventajosa para EE.UU. y el Occidente colectivo. Algunos países -como China, los estados africanos u otros- hacen hincapié que necesita respetarse los intereses nacionales de seguridad de Rusia, hecho que las naciones occidentales no tomaron en cuenta.
Las naciones occidentales prevalecen en la esfera de la comunicación mundial, pero debe estudiarse integralmente el problema.
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Principios a la medida
– El derecho internacional tiene varios principios como la inviolabilidad de las fronteras y la libre determinación de los pueblos. ¿Cuál priorizar?
Es una de las contradicciones fundamentales en el derecho internacional. Para desgracia, los países grandes y fuertes optan por uno u otro principio, basándose en sus intereses nacionales, y en esa esfera hay doble estándar. Por ejemplo, EE. UU. opta por el respeto a las fronteras, si hablamos de Ucrania o Georgia, pero en lo que se refiere a Serbia (Kosovo), prefieren el principio de libre determinación.
Y en cuanto a Rusia, viceversa. Se actúa de manera egoísta, de acuerdo a sus propios intereses. Tradicionalmente, Rusia, después de la desintegración de la URSS, siempre prefirió el principio de libre determinación de los pueblos, en su diplomacia. Pero, en los eventos en Serbia y Yugoslavia, EE.UU. no respetó ese principio en absoluto y se optó por el doble estándar de los países occidentales.
– Hay dobles mensajes, invasiones buenas y operaciones malas, el bombardeo a Belgrado fue bueno y la operación en Ucrania es mala, hay golpes de estado buenos (Ucrania 2014, Chile, Argentina) y malos (Níger, Burkina), referendos buenos (Kosovo) y malos (Crimea, Dombás). El problema no es cuál prefiere uno, sino la verdad, lo legítimo. El respeto al derecho internacional debe ser uno solo…
El objetivo principal de Rusia es advertir a la comunidad internacional, comunicar que EE. UU. y los países occidentales, no tienen monopolio de violar los principios de derechos internacional y que no tienen exclusividad en definir lo que es malo y lo que es bueno. No tiene derecho a definirlo solo por su cuenta y en ese sentido la lucha de Rusia es combatir esas pretensiones, y construir una comunidad internacional más justa. Solo hay dos opciones, si todos los países observan el derecho internacional y lo respetan; o que no existe en absoluto el derecho internacional y pueden violarlo y en este caso no existirá derecho, ni comunidad internacional. Habrá un caos y uso de la fuerza indiscriminado.
Mientras EE.UU. y los países occidentales violan el derecho internacional no tienen derecho ni moral de condenar a Rusia de que viola sus principios.
– Cuando se invadió Libia e Irak y se bombardeó Belgrado, no hubo tanta condena como a Rusia hoy…
Es verdad y eso se relaciona a la dependencia de muchos países a Estados Unidos y eso se puede explicar por la prevalencia de EE.UU. y los países occidentales en los medios de comunicación mundiales y la presencia militar de EE.UU. en muchos países. Debido a eso muchos estados tiene miedo a la superpotencia EE. UU. y a la dependencia del dólar, además de la herramienta de la política de sanciones. Ese no significa que EE. UU. sea un hegemón legítimo, solo tiene un papel de bandido mundial, que asusta a todos.
– Algunos creen que después de Ucrania, seguirá otro país europeo…
Es una tontería absoluta. El objetivo de eso es que los europeos proporcionen más dinero a Ucrania, después de su fracaso militar y alargar el conflicto. Y ocultar su derrota política en las relaciones con Rusia. Esa política solo está encaminada a intimidar y asustar a la población europea. Por parte de Rusia, no tenemos ningún deseo, interés o posibilidad de tener un conflicto militar con otros países europeos o con la OTAN en general. Un conflicto con la OTAN sin duda llegará a la guerra nuclear, en la que Rusia no está interesada en absoluto.
Después del conflicto en Ucrania, Rusia quiere reestablecer las relaciones económicas con algunos países europeos.
– ¿Por qué la OTAN escala el conflicto?
Lo hacen para lograr la derrota estratégica de Rusia. En abril de 2022 obligaron a Ucrania no firmar la paz (en Turquía) con Rusia, por lo que todas las intenciones se encaminan para vencer a Rusia, a expensas de Ucrania, de su economía y su población. Rusia no ha perdido en el aspecto militar, económico o político. La única opción para prevenir el fracaso de Ucrania es firmar la paz con Rusia, con la condición que Ucrania no ingrese a la OTAN.
– ¿Será una realidad el nuevo mundo multilateral?
La guerra de Ucrania aceleró el proceso de construcción de un mundo multipolar. Los países del así llamado Sur Global no quieren adherirse a la política estadounidense y no desean estar contra Rusia o contra China. Y esos países tienen más independencia que antes, por ejemplo, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Turquía, Catar y ahora podemos ver que el mundo va hacia una coyuntura nueva multipolar y multifacética, y. por ejemplo, los Brics tienen más miembros. Para Rusia es un orden más justo y multipolar.
Los países no occidentales en vías de desarrollo juegan un papel más activo en las relaciones internacionales, no aceptan las decisiones de naciones más fuertes, sino que ellos quieren participar en las decisiones, como, por ejemplo, los países africanos presentaron una iniciativa de cómo solucionar el conflicto ucraniano. Un cambio histórico, revolucionario, porque nunca los estados africanos habían presentado su proyecto para solucionar un conflicto en Europa.
– ¿Cuánto daño ha hecho las sanciones a Rusia y cuánto a los sancionadores?
Las sanciones a Rusia fueron impuestas desde el 2014, pero desde el 2022, Rusia está bajo las sanciones totales y Rusia cree que esas sanciones impuestas por EE.UU. y Europa son para siempre. Rusia no va a capitular. Rusia sobrevivió desde el principio gracias a la cooperación de los países no occidentales y su economía será más duradera y sostenible, al mismo tiempo que la influencia de EE.UU. y del dólar va a bajar.
El daño es bastante grande para Europa y ahora podemos verlo, por ejemplo, la desindustrialización de Alemania. Las sanciones agravaron la crisis económica en los países europeos, no tiene el gas ruso que fue bastante barato y las relaciones comerciales con Rusia fueron uno de los factores fundamentales de competitividad de Europa. Y para EE.UU. ahora los países tienen más miedo de utilizar el dólar y su sistema financiero. Las sanciones impuestas contra Rusia es un mal precedente. porque saben que los siguientes pueden ser ellos y eso socava la fe en EE.UU.
(*) Premio mundial de periodismo “Visión Honesta 2023”