– ¿Cómo evolucionará la política en el Perú, ahora que se ha muerto Alberto Fujimori?
Lo más importante es que ojalá que su fallecimiento permita que cese el odio, el rencor, el encono, la lucha fratricida entre peruanos. Ojalá que el fallecimiento del expresidente Fujimori excluya ya de la política peruana estas prácticas que realmente han envilecido la política y han degradado la idea de ciudadanía.
– ¿Es exagerado decir que Alberto Fujimori fue el mejor presidente de la historia, como algunos expresan?
Bueno, Fujimori está en la historia de Perú, guste o no guste por varias razones, la primera porque tuvo un rol protagónico para la finalización del fenómeno terrorista. En segundo lugar, porque equilibró la economía y abrió los ojos para la estabilidad económica. En tercer lugar, porque bajo una metodología peculiar expresó interés por los sectores desposeídos: las zonas rurales, el agua, la luz, las carreteras, los caminos pequeños. Eso es parte de su legado. También hay lo otro, pero, digamos, es muy apresurado hacer un balance de Fujimori. Será la historia la que, con la prudencia, con la serenidad dé el veredicto final, como ha sucedido con otros personajes. Lo importante ahora es demostrar el respeto al adversario y esperar que finalmente este sea la culminación de una malhadada forma de entender la política, a través de la exclusión y la lucha fratricida, y esperar que en el 2026 tengamos otro escenario.
– Considerando a otros presidentes que han sido trascendentes en la historia como Fernando Belaunde, como Manuel Prado o Augusto B. Leguía ¿cómo cree que se le recordará a Alberto Fujimori de acá a unas décadas?
Hay luces y sombras, pero esas luces y sombras no pueden ocultar algo que es evidente y significativo que es que cubrió una etapa en Perú muy complicada, muy difícil y, de alguna manera, no siempre de las mejores maneras, pero de alguna forma permitió darle estabilidad al país, que es muy importante.
– Sobre el ‘fujimorismo’ como activo político ¿cómo cree que siga creciendo?
Fujimori fue un adversario del sistema de partidos políticos, de alguna manera contribuyó a su demolición. Fuerza Popular lo que hace es convertirse en un partido político y operar y actuar dentro de los cánones democráticos. Y nos guste o no nos guste, hoy el fujimorismo es una fuerza organizada y sobre todo que de alguna manera contribuye a la precaria estrategia política que tenemos.
– ¿Considera que Alberto Fujimori merece que le hagan funerales de Estado?
Le corresponde por la ley. El decreto supremo que aprobó el presidente Alejandro Toledo establece los ceremoniales para un presidente constitucional. En consecuencia, no hay ninguna duda que desde el punto de vista jurídico todo este ceremonial no es más que el cumplimiento de la ley. La evaluación de su paso por la política peruana hoy me parece apresurada, hay que esperar algunos años para mensurar o para establecer un balance definitivo.
