Ha pasado una semana del trágico deceso de seis personas, entre ellas un menor de edad, luego del colapso del techo del patio de comidas del Real Plaza de Trujillo. La Fiscalía de la Nación ha llevado a cabo un registro exhaustivo de la infraestructura que cayó, con el objetivo de recolectar pruebas que permitirán determinar las condiciones estructurales que cedió y evaluar posibles responsabilidades en el diseño, construcción o mantenimiento del área afectada.
El semanario Hildebrandt en sus trece accedió a los videos e imágenes que se registraron al día siguiente de la tragedia, los cuales revelan que las deficiencias no solo habría en el mantenimiento, sino también en los materiales de construcción.
El análisis preliminar de los peritos reveló que varias vigas principales y secundarias presentaban signos de corrosión por óxido. Este podría ser atribuido a una falta de mantenimiento adecuado. Además, una delgada placa de acero, instalada como soporte entre las vigas principales y un anillo de concreto, fue tomada en cuenta como un elemento crítico para asemejarse a los estados de soporte.
En entrevista con el citado medio, el ingeniero estructural Luis Bozzo, con formación en la Universidad Nacional de Ingeniería y la Universidad de California en Berkeley, explicó que las placas de acero utilizadas en el diseño del patio de comidas del Real Plaza eran “totalmente insuficientes” para soportar el peso del techo.
Según Bozzo, este tipo de elementos deben cumplir con estándares específicos de resistencia y durabilidad. De esta manera, calificó como una barbaridad que el arco de 50 metros tenga un soporte de “una placa con cuatro pernos”.
Los videos fueron visualizados por el fiscal y peritos que viajaron desde Lima. En este encuentro también participó el ingeniero civil Álvaro Burgos Ramírez, quien laboró en la empresa a cargo de la supervisión de la obra en su momento. Sin embargo, la representante del Ministerio Público decidió que no participe en la toma de pruebas que se realizaría el domingo.