Según el investigador del cambio climático, Javier Núñez, el Perú experimentará una prolongada ola de calor y grandes cantidades de lluvias nocturnas hasta principios de 2024. Además, advierte que el año 2023 podría ser el más cálido de la última década y de todos los registros. Las altas temperaturas se deben al aumento global de la temperatura del planeta debido al uso excesivo de dióxido de carbono por parte de los 10 países más contaminantes. Esto ha provocado un cambio en el ciclo de El Niño y un aumento de las anomalías climáticas, como las fuertes lluvias, los huaicos y los desbordes de ríos en todo el país.
El investigador advierte que la poca preparación de Lima para afrontar estas inundaciones es preocupante y sugiere que se tomen medidas como la construcción de paredes de cemento de 2 a 3 metros de altura en partes de la cuenca media y la limpieza de las quebradas. También es necesario convencer a las personas de que salgan de las zonas vulnerables para evitar mayores daños.
El Fenómeno del Niño es un evento climático que ocurre en la región del Pacífico Sur, incluyendo la costa de Perú. Se caracteriza por un calentamiento anómalo de las aguas del Océano Pacífico, lo que puede provocar intensas lluvias y sequías en diferentes partes del mundo.
En Perú, el Fenómeno del Niño se asocia con lluvias intensas y desbordes de ríos, lo que causa inundaciones y deslizamientos de tierra que pueden afectar a poblaciones enteras, infraestructura y cultivos. Este fenómeno climático suele tener un fuerte impacto en la economía y la sociedad peruana, ya que afecta la producción agrícola, la pesca y el turismo, entre otros sectores.
Es importante mencionar que el Fenómeno del Niño no ocurre todos los años, pero cuando se presenta, sus consecuencias pueden ser graves y duraderas. Por lo tanto, es necesario estar alerta y prepararse adecuadamente para enfrentar sus efectos.
En resumen, el Perú se enfrenta a uno de los peores fenómenos de El Niño en su historia, y es necesario tomar medidas para evitar los posibles eventos catastróficos que pueden ocurrir como resultado de las altas temperaturas y las fuertes lluvias.
