Una marcha sin sentido

por | Sep 5, 2019 | Opinión

Columna del director

Martín Valdivia Rodriguez

      Por:                 

 

                          Una marcha sin sentido

Esos grupetes de izquierda y demás fauna caviar que toda la vida se han dedicado a fregar al país, han anunciado para hoy una marcha llamada “Que se vayan todos”, exigiendo la propuesta presidencial de adelantar las elecciones antes de su mandato constitucional de cinco años. Ellos son los mismos “colectivos” preñados de “progres” que sólo buscan crear tensión y caos en nuestro país, los mismos que se oponen a todo y que inventan cualquier patraña para salir a las calles y alterar el orden público.

Sino veamos la lista de los “organizadores” de la marcha: la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP), la Confederación General de Trabajadores del Perú  (CGTP), Centro de la Mujer Flora Tristán, Plataforma por la Educación, el Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos (PROMSEX), DEMUS, el Movimiento Manuela Ramos, Ni una menos, Marcha Mundial de Mujeres, Paro Internacional de Mujeres Perú y Es Momento.

Es decir, la crema y nata de la caviarada, torpemente avalada por los partidos políticos representados en el Congreso como el Frente Amplio y Nuevo Perú, los mismos que han anunciado públicamente su adhesión a esta marcha. Ya Verónika Mendoza, la astuta lideresa de Nuevo Perú, dejó sentir su palabra ayer por sus redes sociales: ““Esta situación no da para más. Mientras la economía se estanca y la vida se hace cada vez más precaria, los lobbistas y corruptos de siempre se han atrincherado a sus cargos a espaldas de la gente”, dijo, entre otras cosas.

Es decir, los que ayer se rasgaban las vestiduras criticando el cierre del Congreso por Fujimori, son los mismos que ahora salen a las calles para exigir nuevamente el cierre del Parlamento. Ellos se escudan diciendo que la situación es otra muy distinta a los acontecimientos del 5 de abril de 1992, pero en el fondo es lo mismo: pretenden recortar un mandato presidencial y parlamentario que constitucionalmente debe culminar el 28 de julio de 2021.

¿Por qué no exigen en todo caso la renuncia inmediata de Martín Vizcarra? ¿Por qué se convierten estos grupos en furgón de cola de un presidente de la República timorato y sin vocación al diálogo y la concertación? ¿Por qué tenemos que volver a patear el tablero frente a la amenaza de un jefe del Estado que siempre ha buscado la confrontación y la discordia?

Nada cambiará con unas nuevas elecciones. Nada. Volverán los mismos políticos torpes y corruptos, tendremos un Congreso plagado de incompetentes y un presidente que no sabemos de dónde saldrá. No nos vendan esa inocente idea que los problemas del país se solucionarán con el adelanto de las elecciones. No hay excusas para interrumpir esta democracia que tanto nos ha costado. Porque lo que digo y escribo siempre lo firmo.


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