Subdirector de La Razón
En la antigüedad, el emperador Vespasiano construyó el llamado circo romano, que fue una instalación destinada a divertir al pueblo, a través de peleas de animales salvajes (leones, panteras, tigres) traídos de lugares lejanos, o se obligaba a prisioneros a enfrentarse a esas temibles fieras.
En esa época el plato principal eran las luchas de gladiadores, que en su mayoría eran esclavos y prisioneros a los que se forzaba a entrenar y a manejar diferentes armas como lanzas y espadas.
Las autoridades en la antigua Roma siempre se mostraron dispuestas a la organización de estos espectáculos. Fue la política del ‘pan y circo’, como la definió en su momento el poeta satírico Juvenal a finales del siglo I. En los momentos de crisis, los juegos aumentaban, de manera que divertir al pueblo fue una de las herramientas de control social y obtener popularidad del emperador.
Cosa similar ha pasado durante estas últimas semanas, un jefe de Estado con un discurso populachero, promovió un circo con la solicitud de confianza y una amenaza de cerrar a un Congreso desprestigiado, imponiendo unas reformas políticas, cuyo beneficio se sabrá recién después del 2021, porque la bicameralidad y la no reelección congresal se aplicará recién en la elección del próximo parlamento.
En ese circo los congresistas, sobre todo naranjas, eran lanzados a la arena, arrancando aplausos del pueblo y de medios de comunicación aliados del Gobierno. ¿Si cerraban el Congreso como pretendían hacer sus reformas antes del 7 de octubre?
Mientras esto sucede, la reconstrucción del norte por daños causados por el Fenómeno el Niño Costero, a un año de su puesta en marcha, sigue con alarmante retraso. Según cifras oficiales sólo se han transferido S/4.623 millones a las unidades ejecutoras de ministerios, gobiernos regionales y municipios de 13 regiones. La cifra representa solo el 18% del presupuesto total en este rubro.
Es decir, miles de familias de las regiones Piura, Lambayeque y La Libertad habitan en carpas y casas de esteras y triplay. El reporte oficial señala que en Piura hubo más de 97 mil damnificados, en Lambayeque otros 44 mil y La Libertad más de 79 mil afectados.
Ni hablar de temas de salud, según cifras del INEI los casos de anemia subió de 43.6% a 46.6%, en el primer semestre de este año, cuyos números llegan hasta un 75.9% en niños menores de tres años en la Región Puno. Esos son temas centrales, pero el mandatario prefiere, aconsejado de asesores golpistas, en seguir golpeando al Congreso.
Como bien lo ha dicho, el Banco Central de Reserva el constante enfrentamiento entre Ejecutivo y Congreso sólo llevará al país al abismo, hay preocupación de los inversionistas, que a la larga perjudicará a los ciudadanos de a pie.