Por Rostyslav Yavorivskyi, Encargado de Negocios de Ucrania en el Perú)
Durante más de 160 días el Ejército de Ucrania y su pueblo resiste heroicamente la agresión criminal de Rusia
La ventaja numérica de Rusia se equilibró con la valentía de los defensores ucranianos y las armas efectivas de alta precisión proporcionadas por los socios internacionales de Ucrania. Haber sufrido grandes pérdidas (41.170 muertos al 2 de agosto), Rusia continúa la movilización encubierta. El Kremlin ordenó a las regiones rusas que formaran batallones de «voluntarios» para ser enviados a Ucrania. Empresas militares privadas rusas buscan mano de obra en Bielorrusia y en las prisiones. Al darse cuenta de que no podrá apoderarse de nuevos territorios en Ucrania, Moscú intensificó su retórica sobre la necesidad de negociaciones de paz bajo sus condiciones. Para obligar a Ucrania a sentarse a la mesa de negociaciones y obligarnos a aceptar las demandas de Rusia, las fuerzas rusas continúan con sus actos de terrorismo, lanzan ataques con misiles y matan a decenas de civiles en toda Ucrania.
Los esfuerzos de Rusia para aterrorizar a los ucranianos y debilitar la determinación de los socios de Ucrania son inútiles. Estos esfuerzos tendrán el efecto contrario. Solo Ucrania y su pueblo decidirán cuándo y cómo terminará la guerra y se logrará la paz con Rusia. El 89 % de los ciudadanos ucranianos creen que la guerra debería terminar con la liberación completa del territorio de Ucrania dentro de las fronteras internacionalmente reconocidas.
Al mismo tiempo Rusia aumentó el chantaje energético al cortar el suministro de gas a Europa antes de la temporada de calefacción. El Kremlin espera que la presión económica y social causada por sus acciones provoque cansancio en Europa y debilite el apoyo a Ucrania. Estas expectativas son infundadas: en la cuarta reunión del Grupo de Contacto sobre Defensa de Ucrania el 20 de julio, varios países declararon directamente que no hay cansancio de guerra en Ucrania y no lo habrá en el futuro.
Rusia es una amenaza para todos los estados democráticos del mundo. La llamada «posición neutral» adoptada por algunos estados solo provoca que el agresor continúe atacando.
La membresía en la OTAN sería la mejor garantía de seguridad para Ucrania. Hasta que eso suceda, Ucrania necesita garantías de seguridad efectivas y jurídicamente vinculantes que impidan la agresión rusa y permitan a Ucrania reconstruir su economía de posguerra.
Las autoridades competentes de Ucrania registraron daños o destrucción de ~32 400 instalaciones de infraestructura civil, incluidos ~25 400 edificios residenciales y casas, carreteras y puentes, >1500 instituciones educativas y >250 médicas, y >3100 redes de agua y electricidad. Casi 800 mil ciudadanos ucranianos perdieron sus hogares. Estos números no incluyen los territorios ocupados a los que Gobierno de Ucrania no tiene acceso.
129 sitios del patrimonio cultural y 149 edificios religiosos fueron destruidos o dañados por Rusia en Ucrania (hasta el 22 de julio). Esto representa un crimen de guerra según la Convención de La Haya de 1954.
Las tropas rusas violan sistemáticamente las normas del derecho internacional humanitario y derechos humanos en Ucrania: ataques deliberados e indiscriminados contra civiles, su uso como rehenes y escudo humano, ejecuciones y violaciones, reclutamiento forzoso y secuestro, ataques a personal e instalaciones médicas, uso de armas prohibidas, entre otras.
El 29 de julio Rusia cometió un cínico acto terrorista, matando a más de 50 prisioneros de guerra ucranianos mediante una explosión en el territorio de la antigua colonia penal del pueblo de Olenivka. Numerosas pruebas documentadas prueban el carácter planificado de este crimen, en particular el traslado deliberado de prisioneros de guerra a un nuevo local poco antes de la explosión, el análisis de la naturaleza de los daños y el movimiento de la onda expansiva, la interceptación de las conversaciones telefónicas de los militantes, la ausencia de bombardeos en el lugar especificado, etc.
Todos los perpetradores rusos que cometen crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad rendirán cuentas. La Parte Ucraniana inició las investigaciones sobre más de 26.300 crímenes de guerra y crímenes de agresión cometidos desde el 24 de febrero. Estas investigaciones incluyen casos del asesinato de ~6.700 (incluidos 358 niños) y ~8.700 heridos civiles (incluidos 693 niños). Estas cifras, que crecen día a día, no tienen en cuenta los territorios ocupados, a los cuales las autoridades ucranianas no tienen acceso.
Por esta razón Rusia debe ser reconocida legal y políticamente como un estado patrocinador del terrorismo, y las tropas rusas deben ser reconocidas como una organización terrorista. Esto es necesario no solo como un gesto político, sino también como una herramienta efectiva de defensa del mundo libre.
