Meta es obligada a vender Giphy después de que el regulador británico bloquee la compra de 405 millones.
El regulador británico de la competencia, ha ordenado este martes a Meta vender la plataforma de imágenes animadas Giphy, que compró en 2020 por 400 millones de dólares. La CMA ha rechazado los argumentos de Meta, que había apelado el año pasado esa decisión, y pone fin a dos años de batalla antimonopolio.
El regulador considera que la compra de Giphy, el mayor proveedor de gifs para las redes sociales, amenaza con «limitar la elección de los usuarios de redes sociales en Reino Unido y reducir la innovación en la publicidad gráfica» del país. En su opinión, Meta, matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp, podría cortar el acceso a los gifs a rivales como TikTok o Twitter.
El gigante estadounidense ha indicado en un comunicado su «decepción» por la resolución, aunque ha recalcado que la acepta como «la última palabra en esta cuestión». «Continuaremos evaluando oportunidades, incluso a través de adquisiones, para brindar innovación y opciones a más personas en Reino Unido y en todo el mundo», ha añadido. La compra de Giphy fue anunciada por Meta en mayo de 2020.
Es la primera vez que la CMA determina que una big tech estadounidense debe desprenderse de una compañía adquirida. La decisión se produce mientras los reguladores europeos intensifican el escrutinio sobre las grandes tecnológicas por supuestas prácticas anticompetitivas.
La compra de Giphy «ya ha tenido como consecuencia la eliminación de un posible rival en el mercado publicitario británico, al tiempo que le ha dado a Meta la capacidad de incrementar aún más su sustancial poder de mercado en el sector de las redes sociales», indicó Stuart McIntosh, presidente del comité designado por la CMA para analizar el caso. El mercado de publicidad gráfica mueve 7.000 millones de libras en Reino Unido y Facebook controla más del 40% del negocio.