El pasacalle culminó con una presentación musical y artística en la Alameda 28 de julio
La XXI Marcha del Orgullo LGBTIQ+, reunió este último sábado a miles de ciudadanos por las calles del centro histórico de Lima para exigir respeto, tolerancia e inclusión. La concentración inició en el concurrido Campo de Marte y albergó a integrantes, activistas del colectivo LGBTIQ+, junto con artistas y políticos de diferentes tendencias ideológicas.
Al culminar el recorrido por las calles céntricas de la capital limeña, que estuvo acompañado por carrozas alegóricas y largas banderolas multicolores que llegaron hasta la Alameda 28 de julio, culminó en un escenario para otorgar un espectáculo musical y artístico a todos los marchantes.
Jorge Apolaya, portavoz del colectivo «Marcha del Orgullo LGBTI de Lima», expresó a medios locales que esta «vigésimo primera marcha en el Perú tiene lugar en un entorno extremadamente adverso para los derechos humanos LGBTI, especialmente debido a una clase política que intenta socavar nuestra democracia».
«Nos encontramos ante un país que se niega a reconocer los derechos humanos de la comunidad LGBTI. En este sentido, somos prácticamente el único país que no ha legislado a favor de estos derechos fundamentales, carecemos de una ley de matrimonio igualitario, de una ley de identidad de género y de una ley que penalice los crímenes de odio», denunció ante la prensa.
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La exministra de la Mujer, Diana Miloslavich, indicó que además de ser “un día en favor de la comunidad LGBTI+, “también es de la democracia y por los derechos”. Además, cuestionó que la Municipalidad de Lima no haya autorizado para la concentración llegue hasta la Plaza San Martín, a pesar de que “casi todas las ciudades del mundo le dan un espacio a la Marcha del Orgullo”.
Influencers como nuestra actual Miss Grand Perú 2023, Luciana Fuster y artistas de televisión como Florcita Polo, Ricardon Moran, entre otros, apoyaron con algarabia la Marcha del Orgullo. Cabe menciona, que La Marcha del Orgullo 2023 en Perú también se realizó en otras ciudades de nuestro país, entre ellas Arequipa, Chiclayo y Cusco.Sin duda, un precedente que marcaré una continuación a la lucha constate que está cada vez grande comunidad exige porque se respeten sus derechos como cualquier otro ciudadanos que reside en nuestro país.
