La ministra del Cultura, Leslie Urteaga, manifestó la disposición de instalar una mesa de diálogo con los manifestantes del distrito de Machupicchu, que vienen imponiendo fuerza en protesta contra la nueva metodología de venta de boletos al santuario histórico de Machu Picchu, gestionado por Joinnus.
Desde el último jueves 25 de enero, distintas organizaciones gremiales de la zona de Machupichu han impuesto un paro indefinido que ha ocasionado la suspensión de servicios turísticos y de ligamiento a este sector. Por eso mismo, se llevo a cabo una importante reunión por parte del Ministerio de Cultura y el gobernador regional de Cusco, Werner Salcedo, quién también ostenta el cargo de alcalde del distrito de Machupicchu, para abordar el tema de las demandas y huelga.
Tras el fin de la reunión, Werner Salcedo y Leslie Urteaga dieron anuncio sobre una mesa de diálogo programada para el próximo martes 30 de enero. A pesar de ello, los gremios informaron que no se llegó a “ningún acuerdo favorable”, anunciando la radicalización de la huelga.
Dar regreso a la anterior plataforma “no es una opción”
“Entiendo que el alcalde (de Machupicchu) quiere resolver los problemas que hay (…), pero que también trae la voz de algunos grupos que se mantienen opuestos a esta decisión. Hemos insistido con él en que se comunique con los representantes y que nosotros estamos dispuestos a ir a Machupicchu a conversar, pero con la huelga levantada”, agregó la titular.
Respecto a la demanda por parte de los manifestantes, la ministra Leslie Urteaga aclaró sobre el retorno al anterior sistema de venta de boletos a la Llaqta de Machupicchu: “no es una opción”.
“Regresar a la plataforma anterior, para nosotros, no es una alternativa, incluso técnica; porque esta plataforma con la que estamos trabajando tiene medidas de seguridad, candados de seguridad (…) Con todo este proceso que hemos tenido desde el 20 de enero, cuando empezó a sumarse Machu Picchu (al portal), se ha transferido información no del software, sino de lo que estaba como reserva como cupos”.
“Volver a la plataforma anterior no supondría un tema técnico de mayor envergadura. Tampoco es una opción para nosotros volver a ese sistema, ya que la empresa ha manifestado su voluntad de culminar previamente (el contrato). Lo que nosotros estamos insistiendo es que necesitamos un plazo, que podrían ser 60 días, para trabajar en el módulo de la pantalla que ven los operadores turísticos”, agregó.
Indiferentemente, Urteaga dio a entender que la propuesta de Joinnus de terminar de forma anticipada el contrato con el Ministerio de Cultura está siendo sujeta a evaluación por los abogados del sector. Y, respecto al llamado hacia separación del cargo, expresó que aquello “depende única y exclusivamente de la señora presidenta y del premier”.