Iván Torres La Torre – Abogado
La salida del terrorista Morote ha generado el repudio nacional por tratarse del número 2 de Sendero Luminoso. ¿Y las ONG de Derechos Humanos dónde están?
Hay que recordar que los genocidas de Sendero Luminoso violaron los derechos humanos de millones de peruanos. Estos criminales torturaron, descuartizaron, quemaron vivos a militares, policías, profesores, hombres del campo, de la selva, de las ciudades, dirigentes; asesinaron a jueces y fiscales; dejaron miles de huérfanos, volaban torres de energía eléctrica sumiendo a Lima en la oscuridad; tomaron comisarías, llevaban a cabo paros armados. Contra todo esto ¿Qué dicen las ONG de derechos humanos?
Ante todo el genocidio, tortura y barbarie que generó el terrorista hoy liberado y el grupo denominado Sendero Luminoso al que pertenece, y que no ha mostrado arrepentimiento, los defensores de los derechos humanos deberían organizar sus clásicas marchas en la Plaza San Martín; deberían acicatear y financiar a los incautos universitarios para que salgan a gritar contra Morote; es raro que no se les vea, como tampoco se les vio ante la salida de la terrorista, no arrepentida, Martha Huatay, pero se les ve ardorosos y valientes en todos los medios de comunicación, con miles de estrategias legales, cuestionando la salida de algún militar o de un comando Chavín de Huántar que arriesgó su vida por el Perú.
¿Acaso no hay ningún defensor de derechos humanos que acuda a la Corte Interamericana a pedir la nulidad de este fallo? Es más, ¿dónde están mis distinguidísimos colegas que a mandíbula valiente gritan y vociferan “no a la impunidad”? De verdad me esfuerzo por verlos y no los encuentro. Extraño ¿verdad?
Otra pregunta es ¿Dónde están los distinguidísimos miembros de la Comisión de la Verdad? Creo que sería importante que algún medio de comunicación los busque y que expresen su indignación, si es que la sienten y, que no solo recurran a sus discursos retóricos, apelando al derecho de igualdad para todos. Nuevamente los busco en los medios de comunicación y no veo a ninguno de los comisionados. ¿Por qué será?
Yo quiero buscar a un denominado “senderólogo” muy antiguo, que conoció muy de cerca a Abimael Guzmán y tampoco se le ve protestando, indignándose, como todos los peruanos nos sentimos ¿Por qué será?
Estas son las contradicciones de los que se hacen llamar defensores de los derechos humanos y es por estas mismas contradicciones que se han desprestigiado, por su falta de objetividad, por el sesgo altamente ideológico de sus apreciaciones. Han evidenciado ante la opinión pública que detrás de todo este famoso lema de los derechos humanos hay un gran negocio; reconociendo también que existen colegas abogados que creen en la defensa de los derechos humanos pero que no perciben la verdad que hay detrás.