Por: Omar Chehade / El presidente, Martín Vizcarra, no se cansaba de repetir veinte veces en sus conferencias de prensa la palabra: “esfuerzos”, “los esfuerzos del gobierno para combatir la pandemia”, “nos estamos esforzando”, sin embargo, nunca exhibía resultados alentadores. Su entorno tampoco alentaba mucho, Farid Matuk, era un personaje de Disney. Nos costaba creer que fuera uno de los pilotos del “comando anti covid” que formó el gobierno para vencer la pandemia. Luego este pintoresco tipo tendría que reconocer un grave error: fue el autor de las salidas de mujeres y hombres en días distintos, dijo: “lo hice para combatir el patriarcado en las familias machistas”, mientras tanto, con su estúpido experimento, aglomeró millones de personas en mercados, bancos y transportes. Luego este mismo señor, se atrevió a efectuar una apuesta siniestra: “una caja de chelas (cervezas) que a fin de mes llegamos a la meseta de muertos e infectados”, sí, tal como lo lee, apostaba públicamente en su Twitter la cantidad de fallecidos que habría, por una caja de cervezas. Lo peor es que el presidente Vizcarra, lo mantuvo en el cargo. Mientras este vergonzoso episodio ocurría, teníamos como ministro de salud, a un sádico e inepto personaje como Víctor Zamora, quien se negó a comprar pruebas moleculares de descarte, y prefirió en un 80% las rápidas, aquellas que daban falsos negativos, y que mataron a tanta gente o hicieron que otros se contagien de este grave virus. El gobierno es el principal responsable de los más de 60 mil muertos que existen, y que hasta ahora se empecinan en ocultar las cifras reales. Lo increíble es que ahora se empeñan en continuar con estrategias erradas que nos han llevado al fracaso, y que seamos el sexto país más infectado del mundo y el segundo de mayor mortalidad, a pesar de haber tenido la cuarentena más estricta. Después del voto de confianza que le otorgamos al nuevo premier, Walter Martos, pensamos que haría olvidar al inepto de Vicente Zevallos, pero vemos que las diferencias no son demasiadas, pues ha vuelto con tácticas funestas anti covid que han fracasado, como otra vez los domingos confinados en nuestras casas, sin darse cuenta que origina más aglomeraciones y contagios los días sábados. Eso sin contar que quebrarán al rubro comida y restaurantes que empujaba nuestra economía. Me enteré que el toque de queda los domingos eran consejos del investigador Hugo Ñopo. Pero no se dan cuenta que los resultados anteriores han sido tan categóricos que superan cualquier otra nueva investigación. Luego sale Martos a contradecir a la ministra de salud, Pilar Mazzeti, diciendo que ya no se comprarán pruebas moleculares, que ya es muy tarde, porque la comunidad infectada es muy grande, yendo en contra de todos los estudios científicos. Todo esto es de terror, mientras nuestra gente se va muriendo sin ninguna contención sanitaria del gobierno; total, como Vizcarra sostuvo hace un mes: “nadie se salvará, al final todos estaremos infectados”. La política de: “sálvese quien pueda” es el nuevo norte de este nefasto gobierno. Solo nos queda la resistencia democrática.
(*) Ex Vicepresidente y Congresista de la República